La intervención policial en la casa de Isaac y Beatriu un mes antes de asesinarle: "Le encontramos en el suelo incapaz de moverse"

Jonathan, policía del Grupo de Homicidios y Desaparecidos de Valencia, recuerda cómo investigaron el crimen de Isaac, el policía asesinado por su mujer, Beatriu, en 2019. Explica que, al principio, en la relación con Beatriu "parecía ser todo bonito": "Se habló con la mujer, y una relación buena en la que ella se volcaba en cuidarle y en que no le faltara nada".

Isaac había estado casado en 2003 con otra mujer, con la que había tenido dos hijos. El entonces policía conoció a Beatriu en 2012, la cual tiene un hijo de una relación anterior. La pareja empezó una relación sentimental clásica, pero cuando se va deteriorando la situación física de Isaac llegan a un pacto de casarse. "Él recibe cuidados de parte de ella a cambio de que ella sea la gestora del dinero que recibe mensualmente de pensión de discapacidad", explica Teresa Domínguez, redactora jefa de sucesos y tribunales del diario 'Levante-El Mercantil Valenciano'.

"Cuando empezamos a hablar con los hijos de Isaac y con los familiares ya empiezan a contarnos que en realidad no era tan bonita esa relación", explica el agente, que destaca que "cuanto más avanzaba la enfermedad de Isaac, peor era la relación". La situación estaba tan deteriorada que, un mes exacto antes de la desaparición de Isaac, hubo una intervención policial en el domicilio, tras avisar los vecinos por los gritos que se estaban escuchando. Al llegar, los agentes vieron a Isaac en el suelo muy nervioso incapaz de moverse. Beatriu les dice que se abalanzó sobre ella y que creía que le había intentado agredir, sin embargo, la patrulla no percibió tal agresión. Los agentes afirmaron que lo que vieron fue "una discusión de pareja motivada por la enfermedad de él, normal porque eso desgasta mucho".