Conflicto en Oriente Próximo

Guillermo Fesser, sobre las elecciones de EEUU: "El apoyo incondicional a Israel puede costarle a Harris las elecciones"

Como indica el periodista, a nivel político la situación es muy delicada para Joe Biden, que ha sido muy criticado por los propios demócratas por su apoyo sin condiciones a Netanyahu.

Además de la llegada del huracán Milton a las costas de Florida, otro de los temas que ocupa la actualidad en Estados Unidos es la guerra que Israel ha desencadenado en Oriente Próximo. Benjamín Netanyahu y Joe Biden habrían conversado durante 50 minutos para discutir el plan del primer ministro israelí de atacar Irán, algo que podría afectar de manera directa a los resultados de los comicios estadounidenses.

Como expone Guillermo Fesser, las relaciones entre ambos son tensas. "En el nuevo libro de Bob Woodward, 'Guerra', afirma que Biden ha acusado, en numerosas ocasiones a Netanyahu de no tener estrategia y que cuando Israel bombardeó Líbano pegó un golpe en la mesa en la Casa Blanca y gritó", expone el periodista. "Esto en privado", añade, "en público ha apoyado 100% y que las bombas que han caído sobre Gaza son americanas".

Esta llamada ha coincidido con una escalada bélica de Israel y sin ningún signo de alcanzar un alto al fuego con Hamas y un regreso de los rehenes. La tensión, además, "ha aumentado en las últimas horas", argumenta Fesser, "porque Israel lanza ataques sin informar al Pentágono". El periodista considera que la situación, políticamente, "es muy delicada para un Biden que ha sido criticado por los demócratas por apoyar a Netanyahu sin condiciones".

Esto, además, está poniendo en un aprieto la candidatura de Kamala Harris. "Este apoyo incondicional a Netanyahu, amparado en el derecho de la autodefensa, puede constarle a Harris el estado de Michigan, crucial para que ella gane las elecciones", indica.

"Se supone que la llamada era para cambiar la idea del primer ministro israelí de atacar los pozos de petróleo de Irán pero sin hace eso EEUU puede verse arrastrado a una guerra lo que significaría un horror para todos y la puntilla para Kamala Harris". "Nadie quiere una nueva guerra en EEUU", concluye Fesser, "una guerra que no entienden y que cuesta mucho dinero precisamente ahora que necesitan mucho dinero para levantar el desastre de Milton".

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