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'Operación Brody'

Wyoming, sobre las imputaciones a Rocha y Rubiales: "El clásico del fútbol español es sacarle partido al cargo de presidente"

Sandra Sabatés y Wyoming analizan las palabras de Rubiales tras declarar ante la jueza, donde asegura que "buscaba la legalidad": "Le pasa lo mismo que con la mejilla de Jenni Hermoso, que no es capaz de encontrarla", ironiza Wyoming.

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En su declaración ante la jueza por la investigación contra él por presunta corrupción, Luis Rubiales ha asegurado que la Supercopa de Arabia Saudí "salvó al fútbol español". El expresidente de la Real Federación Española de Fútbol también ha tenido que dar explicaciones sobre otros contratos sospechosos, como la reforma del estadio de La Cartuja, así como proyectos urbanísticos en Oriente Medio y República Dominicana.

A la salida del juzgado, Rubiales ha afirmado que siempre ha obrado "en la búsqueda de la legalidad". "Él siempre lo ha hecho todo buscando la legalidad y, sin embargo, le acusan de corrupción, administración desleal, blanqueo de capitales, pertenencia a organización criminal e incluso tiene otro caso abierto por agresión sexual", recuerda Wyoming en el vídeo sobre estas líneas, donde asegura que "parece que le pasa con la legalidad lo mismo que con la mejilla de Jenni Hermoso, que no es capaz de encontrarla".

En la llamada 'Operación Brody' también está imputado el actual presidente de la Federación, Pedro Rocha, sobre el que el Gobierno ha aplazado la decisión de cesarle, pero tutelará a la Federación. Por ello, Wyoming incorpora a "Rochandinho" como 'fichaje estrella' de presidentes de la Federación que podrían formar parte de la "selección española de la corrupción", junto a Pablo Porta, José Luis Roca, Ángel María Villar y Luis Rubiales. "El verdadero clásico del fútbol español es sacarle mucho partido al cargo de presidente de la Federación", comenta.

A Rubiales se le suma la confirmación de la Audiencia Nacional de la apertura de juicio oral contra él, Jorge Vilda, Albert Luque y el jefe de marketing por las coacciones a Jenni Hermoso para que grabara un vídeo en el que declarara que el beso había sido consentido. "La selección jugaba con un 4-3-3 para ganar el Mundial y Rubiales con un 4 contra 1 para presionar a Jenni Hermoso, una jugada que le salió tan mal que pasó de la presidencia de la Federación Española al banquillo de la Audiencia Nacional", ironiza Wyoming.

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