LA JEFA INFILTRADA NO AGUANTA LA RISA AL DEPILAR UNA OREJA
Pilar: “Tu eres mi empleada y ese día te pongo en la puerta”
Marta conoce a Pilar, una franquiciada en apuros, que si no consigue beneficios tendrá que cerrar. En su jornada de manicura y depilación, la jefa infiltrada tiene que depilar las orejas a un hombre que acude a D-beauty Group para que le hagan el servicio. Sin embargo, a la jefa le entra un ataque de risa que no gusta al cliente y menos a Pilar que confiesa que si hubiera sido su empleada, la hubiera echado a la calle.