MARC CAMPDELACREU VIAJA A UNO DE LOS BARRIOS MÁS POBRES DE ESPAÑA
Jalel, taxista de El Príncipe: "El Corán dice que matar es pecado pero yo no me meto, que cada uno haga lo que quiera"
Marc Campdelacreu viaja al barrio de El Príncipe para tratar de saber algo más de la gente que desde Ceuta o Melilla dan el salto hacia Siria o Irak para sumarse al Estado Islámico. Los vecinos de este barrio ceutí han sido testigo en los últimos meses de operaciones contra el yihadismo, que suelen ser el resultado de largos procesos de radicalización, y que empiezan a encender las señales de alarma.
El periodista pregunta a un agente de Policía cómo localiza a gente española que está interesada en mensajes de ISIS, algo que se rastra a través de los foros. "Si alguien comenta algo en el foro, intentamos localizar desde dónde se están conectando esas personas. Si detectamos que alguno pudiera esta en Ceuta o en Melilla o en cualquier otro sitio, intentaríamos analizar a este tipo de personas", relata.
El capitán de la Unidad Especial de Terrorismo Transnacional de la Guardia Civil explica que a pesar de estos vídeos, el contacto directo sigue siendo una forma de radicalización y de captación. "Para pasar de España a Siria, el paso natural es a través de Turquía, destino tradicional de muchos turistas españoles", afirma.
Jalal, un taxista que vive en El Príncipe, cuenta que conoce a chicos que se han ido, pero no saben "el motivo por el que se han podido ir", puntualiza. "Vivía en la parte baja de El Príncipe y luego me mudé y dejé de tener contacto con ellos. Es una cosa muy delicada".
Este taxista dice que "cada uno sabe lo que hace. En realidad está mal porque el Corán dice que matar es pecado, pero cada uno ya con la ideología que tiene en su cabeza. Yo no me meto, que cada uno haga lo que quiera".
En este barrio ceutí hay 12.000 habitantes. La tasa de paro juvenil es del 76% y un 66% de los hogares están en situación de pobreza. Verónica Rivera, profesora responsable del proyecto 'Formación para la Transformación' , hace una labor muy importante, que es formar a las madres de El Príncipe. “Deben ser conscientes de su labor como educadoras en la familia y como transformadoras de la sociedad".
Habla una de las madres formadas en este centro y explica que los niños se sienten exluídos. "Si tú a un crío le estás excluyendo de toda la materia que hay en la sociedad, ¿cómo va a salir este chico?"