Sistach sobre la ley del aborto: “Si se permite en caso de malformaciones saldremos en contra”

Según Sistach, si la norma incluye estos supuestos el discurso de la jerarquía eclesiástica “será éste porque la vida es el derecho fundamental primario” y asegura que el propio Papa Francisco también ha dicho que “la paz se ve en peligro cuando se falta a la dignidad de las personas, y un aspecto importante es respetar la vida humana del más débil: un feto que está a punto de nacer”.

El arzobispo de Barcelona no cree que la iglesia sea machista, aunque reconoce que “hay distinciones” y asegura que no hay mujeres sacerdotes “porque hay una tradición en la Iglesia de que sólo hubiera apóstoles”. “No sé si se puede clasificar de machista. La Iglesia valora la dignidad de la mujer y le da confianza en lo que realiza. Hay una sola cosa, que es el sacerdocio, que no realiza”, ha declarado.

Sistach cree que a que los homosexuales “se les tiene que respetar como a cualquier otra persona”, aunque no ha entrado a valorar si son enfermos, como opina parte de la Iglesia. “Yo no soy un técnico”, ha dicho el cardenal arzobispo, que cree que las críticas a las parejas del mismo sexo “vienen porque se da un juicio sobre sus actuaciones concretas. La moral cristiana califica como buenas o malas determinadas cosas, pero no sólo en los homosexuales”.

Ha revelado que durante su audiencia con el papa Francisco habló de la situación de España, aunque no ha detallado si abordó la propuesta de consulta por parte del Gobierno catalán para pedir la independencia de la Comunidad. “Con el papa he tenido una audiencia larga y hemos hablado de muchos temas. Hay cosas que dependen de católicos y no católicos. Esta es una cuestión que la sociedad tiene que decidir”, ha dicho.

Sobre la consulta catalana: "Es la sociedad la que tiene que decidir"

Para el arzobispo, el papa Francisco “está trabajando mucho” y no cree que sus actos sean pura fachada. En su labor “hay letra y música. La letra irá llegando, la música es más fácil, pero está haciendo ya gestos importantes y estos gestos llevan una letra”, cree.

Sistach ha hablado de la situación de la iglesia española y ha reconocido que la jerarquía ha podido equivocarse. “La  gente desearía que fuéramos más coherentes. Los que hablamos tenemos que ser coherentes. Los políticos hablan mucho y ¿qué aplican? Nosotros también predicamos mucho y a veces nos preguntan ¿y qué hacéis?”, ha señalado.

Asegura que la iglesia sí está cerca de la gente, aunque reconoce que quizá “en la dimensión más social y ética de la economía” no ha dado “un mensaje claro y radical”. “La economía debe estar al servicio de las personas y no al revés”, ha añadido Sistach, que cree en estos años de crisis la Iglesia “hace lo que puede, ayudando y denunciando las cosas que no funcionan”.

Defiende, además, que la iglesia también ha sufrido recortes pues “entra menos dinero para las necesidades pastorales” y sobre el sistema de financiación de la misma ha señalado que el sistema “respeta la libertad religiosa y la voluntad de los ciudadanos” al poder decidir en la declaración de la renta si destinan el 0,7% de sus impuestos a la Iglesia. “El 0,7% no nos da ni para pagar los sueldos de los sacerdotes, que no llegan a 1.000 euros mensuales, no les llega para vivir”, ha señalado.