El 'arte' político de no responder a preguntas

El programa analiza la financiación de los partidos y trata esclarecer de dónde procede el dinero. Además, el equipo de 'El Objetivo' vigila de cerca lo que dicen los políticos ante las preguntas de los periodistas. El primer ejemplo es María Dolores de Cospedal, preguntada por su afirmación sobre la falsedad de datos en los documentos de Bárcenas, respondió en rueda de prensa "le puedo decir muchas que son mentira, pero entraría en el análisis de un papel al que le resto toda la veracidad, y no voy a entrar".

"Conseguir respuestas es casi una misión imposible"

La siguiente en la lista es Carme Chacón, quien durante su comparecencia para anunciar que dejaba temporalmente su escaño de diputada evitó hablar sobre nombres que suenan como posibles para aspirar a la secretaría general del Partido Socialista, "no quiero hablar ahora mismo de personas, les cuento cuál es mi proyecto inminente en estos meses que vienen".

Rita Barberá también dio una rueda de prensa después de que la Fiscalía anticorrupción pidiera su imputación junto a la del expresidente de la Comunidad Valenciana, Francisco Camps. Preguntada sobre el auto y la crítica del juez a las administraciones de la Comunidad Valenciana y la posible adjudicación de obras a dedo aseguró: "me remito a la contestación anterior, me remito a la contestación anterior", insistía una y otra vez Rita Barberá.

Otra protagonista es Ana Botella, preguntada por un periodista acerca del paro en España y sobre si los Juegos Olímpicos son la mejor forma de gastar dinero respondió que "tenemos el 90% de las infraestructuras hechas, son unas infraestructuras de gran calidad".  Es casi misión imposible conseguir respuestas en las ruedas de prensa.

Ocurre lo mismo durante las entrevistas, ante preguntas que no gustan, hay quienes optan por levantarse e irse. Durante una entrevista, el ministro de economía argentino, Hernán Lorenzino expresó que se quería ir. No encontraba respuestas a las preguntas de una periodista que expresaba que el FMI impondría sanciones por las estadísticas falsas sobre inflación que Argentina estaba dando. También están en esta lista George Bush, Felipe Calderón o Silvio Berlusconi.