Los extraños movimientos bancarios antes del asesinato del matrimonio de ancianos: "Desaparecieron 78.000 euros y aparecieron once ingresos de 400 euros"

Rogelio fue la última persona que vio con vida a Antonio Quesada y Ana María Artiles, el matrimonio de Guanarteme que apareció brutalmente asesinado en el Barranco de las Vacas. Antes de desaparecer se reunieron con él en el banco donde tenían todos los ahorros cuando la sucursal estaba ya cerrada. "Rogelio se quedó con los 78.000 euros de mis padres", denuncia Loli, una de las hijas del matrimonio asesinado, que niega que ese dinero lo sacaran ellos de forma consciente y mucho menos que llegara a su casa. Además, la firma que autorizaba ese traspaso no era la de su padre.

"La Policía empieza a mirar las cuentas de los desaparecidos y se dan cuenta de que había una salida de dinero de 78.000 € que nadie se explicaba", comenta el criminólogo del caso. "Estamos hablando de que desaparece un dinero y no se sabe dónde ha ido", recalca.

Es por eso que el reportero de Equipo de Investigación le pregunta: "¿Cómo justificó Rogelio que desaparecieran esos 78.000 euros de la cuenta de Antonio y Ana María?". "Dijo que no estaban muy contentos con los tipos de interés que tenía el banco en los depósitos y decide que se lo mueve él. Tras esa salida de los 78.000 euros, hay 11 ingresos superiores a los 400 euros y dice que son los intereses que les generaba ese dinero". Pero el dinero, 12 años después del brutal asesinato de Ana María y Antonio, sigue sin aparecer.