Analizamos las "fortalezas y debilidades" de la carta en la que la acusada del crimen de la Guardia Urbana culpa a su ex

Rosa Peral, en prisión por el asesinato del que entonces era su pareja, Pedro Rodríguez, rompe su silencio tras saberse que la Fiscalía pide para ella 26 años de prisión. Lo ha hechohaciendo llegar una misiva al periodista Carlos Quilez, en la que reivindica su inocencia.

En ella, Peral carga contra su expareja, Albert López, también en prisión por ser el presunto coautor del asesinato. De él dice que es "un impresentable, psicópata que ha modificado por cuarta vez su declaración ante la juez".

Beatriz de Vicente, abogada y criminóloga, sostiene que el escrito del fiscal del relato de los hechos punibles es "absolutamente difuso": "Mantiene que hay un acuerdo de voluntades para matar pero no puede describir el 'modus operandi'".

Respecto a la carta de Peral, la criminóloga indica que tiene dos puntos fuertes y uno débil: "Demuestra de forma contundente la buena relación que tenía con la víctima con billetes de crucero, pruebas de embarazo... ¿qué motivo tendría en una relación tan idílica? Además, demuestra la animadversión que tiene Albert con la víctima", explica de Vicente.

El punto débil, para la criminóloga y abogada, es que se mantuvo 14 días sin decir nada porque tenía un miedo insuperable, "pero eso ha de ser instantáneo, no dos semanas después, es algo difícil de sostener".