Entre 5 y 10 personas se ensañaron con él durante 150 metros: así fueron los 15 minutos en los que asesinaron a Samuel Luiz

La madrugada del 4 de julio Samuel Luiz fue asesinado en A Coruña. Era la noche del sábado al domingo, y sobre las 2:50 horas, el joven se encontraba junto a su amiga Lina en un pub llamado 'El Andén', cerca de la playa de Riazor.

Al salir del pub, Samuel saca su móvil y hace una videollamada con la novia de su amiga Lina. Es él quien aguanta el teléfono en su mano mientras los tres hablan de cómo les está yendo la noche y de los planes que podrán hacer el próximo fin de semana.

Samuel gira su móvil y empieza a enseñar a la novia de Lina el ambiente del pub donde están de fiesta. En ese momento, se cruza con su agresor. No se conocían de nada, pero al verle con el móvil de Samuel se cree que le está grabando.

"Para de grabarme si no quieres que te mate, maricón": esas son las palabras que, según su amiga Lina, le dijo. A Samuel no le dio casi tiempo a contestar cuando recibió un puñetazo en la cara.

Continuó propinándole golpes hasta que apareció otro joven que consiguió parar la agresión. Ya eran aproximadamente las 3:00 de la madrugada. Acto seguido, Samuel, con varios puñetazos ya en la cara, le pidió a su amiga Lina que vuelva dentro del pub, y él quedó solo.

En ese momento, el agresor reaparece con un grupo de personas, y Samuel echa a correr por el paseo marítimo de Riazor. Le atraparon y durante 150 metros ese grupo no paró de golpearle.

El joven no pudo más y cayó al suelo. Estaba destrozado e indefenso. Eran entre 5 y 10 personas que pasaron de los puñetazos a las patadas en cualquier punto del cuerpo, sobre todo en la cabeza. Le propinaron golpes tan fuertes que le partieron el cráneo. De hecho, a la espera de la confirmación de la autopsia, la causa de la muerte es un traumatismo craneoencefálico severo.

La paliza solo duró 15 minutos. En un cuarto de hora acabaron con su vida. Eran las 3:15 y los agresores ya habían huido. Dos testigos de la brutal agresión fueron Marco y Pablo. Pasaron a las 3:15 por el número 2 de la Avenida de Buenos Aires, en el paseo marítimo de Riazor. Intentaron auxiliar a Samuel, pero el joven ya no respondía.

"Sangraba y estaba muy mal. Procedimos a ponerlo de lado, pero no reaccionaba. Fue muy duro", ha explicado uno de los viandantes. Tan solo una hora después, Samuel moría en el hospital de A Coruña.

La Policía ya ha logrado detener a tres personas relacionadas con el crimen, pero hasta ahora no han confirmado que haya sido un crimen homófobo. Se trata de hombres y una mujer, todos de nacionalidad española y de entre 20 y 25 años. Son amigos entre ellos, aunque no conocían de nada a Samuel.

Según la Policía, los dos varones serían autores materiales del asesinato de Samuel. Ella estuvo presente y, según las primeras pesquisas, llegó a jalear la agresión. La Policía los tenía identificados desde el primer momento, pero necesitaban delimitar bien la responsabilidad individual de cada uno. Actualmente se encuentran detenidos ante el riesgo de fuga.

Además, según expone el Cuerpo, va a haber más detenciones. Hay indicios que acreditan la implicación de más personas en el asesinato de Samuel, concretamente, los agentes creen que estaríamos hablando de entre 5 y 10 personas.

No todos tendrían porqué ser autores materiales. El resto de implicados pueden ser detenidos por su participación directa, por omisión de socorro, o por ser cómplices.

La agresión contó además con numerosos testigos. Por el momento, se ha tomado declaración a 15 personas y hoy han pasado más por comisaría para testificar. Entre los declarantes estaban los tres detenidos, y podrían incluirse más.

También se ha interrogado a personas que intentaron socorrer a Samuel. Es el caso del joven senegalés que intervino en los primeros momentos del incidente. Se interpuso entre Samuel y los agresores, intentó parar esos primeros puñetazos, pero se vio desbordado.

Esta misma mañana han declarado Lina y Vanesa. La primera estaba con Samuel en la puerta de la discoteca, y Vanesa era quien estaba al otro lado de la videollamada. Ambas, han ratificado su versión: Mientras agredían a Samuel le gritaban: "Maricón de mierda".

Otra de las claves de la investigación se encuentra en las imágenes de la agresión. Hay tres fuentes de información: las cámaras colocadas por el Ayuntamiento en las calles de A Coruña, las cámaras de los locales comerciales que están en la zona donde pasó todo y los vídeos de los móviles de los testigos que grabaron algún momento de lo ocurrido.

Con todas estas imágenes la policía judicial de A Coruña ha realizado un atestado muy detallado para poder identificar sin ninguna duda a los autores materiales de la agresión a Samuel.