Las fechas clave

Cronología del correo de Lobato: ¿lo recibió antes de que los medios lo publicaran?

Para entender dónde estamos... Es necesario retroceder al 2 de febrero, cuando el abogado del novio de Ayuso envió un correo a la Fiscalía reconociendo delitos fiscales. Sin embargo, el escándalo no salió a la luz hasta dos meses después, cuando la información comenzó a difundirse en los medios.

La polémica en torno al correo electrónico que Juan Lobato mostró en la Asamblea de Madrid y que utilizó en su cara a cara con Isabel Díaz Ayuso se complica al analizar la cronología exacta de los hechos. Las fechas y los tiempos de acceso al correo son fundamentales para esclarecer cómo el dirigente socialista obtuvo la información y si, como él afirmó en un principio, el correo provenía de los medios de comunicación.

El 2 de febrero, el abogado del novio de Ayuso envía un correo a la Fiscalía en el que se reconocen dos delitos contra la Hacienda Pública y se propone un pacto.

Más de un mes después, el 12 de marzo, el escándalo en torno al contenido del correo llega a los medios de comunicación. La información comienza a ser divulgada, pero aún no se sabe de dónde proviene el correo ni cómo se obtuvo.

El 14 de marzo es clave en la cronología de los hechos. A la 1:25 de la madrugada, uno de los medios de comunicación publica un extracto del correo. Sin embargo, los detalles completos no se conocen hasta más tarde en la mañana. A las 7:14 y a las 9:06, dos medios distintos publican el correo completo. Es en este momento cuando Juan Lobato parece haber tenido acceso al correo.

Según la versión de Lobato, esa misma mañana, él recibe el correo a través de un contacto en Moncloa. En conversación con la mano derecha de Óscar López, jefe de gabinete de Moncloa, le confirman que tiene el correo y le sugieren que lo use en la Asamblea de Madrid esa misma mañana. Aunque no se sabe con exactitud la hora de la conversación, lo cierto es que a las 10:10 de la mañana, Lobato ya tiene en sus manos una copia del correo y lo utiliza en su intervención ante Ayuso.

Lo curioso es que el correo que Lobato presenta ese 14 de marzo parece ser casi idéntico al que se había publicado a las 9:06, con los mismos tachones y marcas visibles. Esto genera dudas sobre si Lobato ya tenía el correo antes de que los medios lo hicieran público o si realmente lo obtuvo a través de las fuentes de Moncloa después de que la información estuviera en circulación.

En octubre, el Tribunal Supremo da un giro al caso, imputando al Fiscal General del Estado y ordenando el registro de su despacho, además de confiscar sus dispositivos electrónicos. Este avance en la investigación refleja la magnitud del escándalo.

A principios de noviembre, Juan Lobato acude ante notario para dejar constancia de que, según le habían informado en Moncloa, el correo que presentó provenía de los medios de comunicación y no de ninguna filtración oficial. Este gesto de formalizar su versión añade más incertidumbre sobre el origen del correo.