Debemos abordar ya el grave problema de la energía: así están actuando otros países para reducir su consumo

España lleva ya 15 días aplicando la llamada 'excepción ibérica'. Lejos del drama del primer día, empieza a funcionar: pagamos menos que nuestros vecinos por la energía. Hoy, la luz en Alemania está en 314 euros el megavatio hora; en Francia, a 343; en Italia, a 370 euros. Y en España está a 222 euros el megavatio hora, incluida la compensación. El Gobierno asegura que, sin esta excepción, estaría a 292 euros. Así que nos estaríamos ahorrando 70 euros.

Ahora, pasemos del mercado a las facturas: ahí, el ahorro es de un 14% en estas dos semanas. Y otro dato más que le ha gustado remarcar a la Vicepresidenta tercera de Teresa Ribera: desde que está en vigor la 'excepción ibérica', las eléctricas han visto reducidos sus beneficios en 250 millones de euros. Aun así, en España se está hablando poco de la disminución del consumo de energía, aunque es un debate que deberemos empezar a abordar.

Alemania, por ejemplo, ya se ha puesto en marcha. Su ministro de Economía y Clima ha lanzado sus primeras recomendaciones. Ha dicho Robert Habeck, líder de los verdes, que "no se trata de oler mal o ducharse menos", sino de reducir el tiempo de la ducha de 10 a 5 minutos. Por ello, ha recomendado a sus compatriotas que cambien la alcachofa de su ducha por una más moderna para ahorrar, que cocinen con la olla tapada para mantener el calor y que corran las cortinas cuando tengan el aire acondicionado, puesto para que no se escape el frío por los bordes de las ventanas.

Hay más: Japón está viviendo una ola de calor y su Gobierno ha pedido a todos los ciudadanos que apaguen la luz entre las 15:00 y las 18:00 horas. Y en medio de esas altas temperaturas, han llegado a emitir su primera 'advertencia de escasez de energía'. Por contra, en Australia lo que están sufriendo es una ola de frío, y allí les han pedido directamente que no usen la electricidad entre las 18:00 y las 20:00 horas. Ha sido en Nueva Gales del Sur, el estado donde está Sidney.

Otro ejemplo: Italia ha limitado las temperaturas en el interior de sus edificios públicos. En verano, a 27 grados. Y en invierno, a 19. Así durante un año, de momento. En los Países Bajos también han pedido a sus habitantes que sus duchas duren menos tiempos. En España, de momento, no dicen nada de las duchas, pero el Gobierno sí que recomienda compartir el coche para ir a trabajar, conducir más despacio, también pasar un poco de calor y evitar tanto el aire acondicionado o incentivar el teletrabajo.