Guerra urbana: así es el conflicto bélico que supone una brutal devastación para las ciudades

La incursión terrestre de Israel sobre la Franja de Gaza parece inevitable. Allí hay túneles que llegan a estar a 80 metros de profundidad. Están repartidos por todo Gaza y sirven también a Hamás como arsenal para almacenar sus armas, pero a pesar de los túneles y los escondites, la ciudad de Gaza es un lugar complicado para una guerra. Realmente, todas las ciudades lo son. Y a pesar de que han sido un escenario de violencia desde que los seres humanos comenzaron a construirlas, las guerras urbanas son consideradas como las más complejas de combatir.

Las guerras de trincheras quedaron en un segundo plano en la segunda mitad del siglo XX. Los conflictos contemporáneos se deciden principalmente en guerra urbanas y marcan las tendencias que están viéndose en la Segunda Guerra Mundial. Sin embargo, el combate urbano es muy complejo porque la ciudad en sí misma limita físicamente.

Un gran ejemplo de ello fue la batalla de Stalingrado (1942-1943). La ciudad rusa fue una ratonera para los alemanes. Los soldados soviéticos supieron aprovechar lo que quedaba de la urbe tras los bombardeos para convertir las ruinas en fortalezas y exponer a los alemanes a la lucha callejera que habían evitado. Ocurrió en la Fábrica Octubre Rojo y en la casa de Pávlov, que los soviéticos usaron para defenderse durante dos meses. Causaron así más bajas en el ejército alemán que en todo su avance de Paris.

También fueron ratoneras Berlín o Manila en sus respectivas batallas. Y si avanzamos en la historia también ocurrió algo similar en la batalla de Hue (1968) durante la guerra de Vietnam. En este caso, como la ciudad está dividida por un río, lo primero que hizo el ejército vietnamita fue cortar los puentes y aislar a los combatientes, por lo que el terreno físico fue una ventajoso para ellos y consiguieron disminuir la superioridad tecnológica de sus oponentes, que además se vieron mermados, porque el campo de batalla urbano implica un gasto de recursos altísimo.

Uno de los grandes restos de la guerra urbana es la movilidad. Los fuegos preparatorios y de asalto crean escombros que bloquean los movimientos de los vehículos Un ejemplo más reciente son las batallas de Faluya (2004). Allí ocurrieron los combates más sangrientos de la guerra de Irak. Y da una muestra de como en la urbe el defensor puede resistir gracias a la construcción de complejos defensivos por toda la ciudad.

Pero si hay una guerra urbana que pueda ser similar a la de Gaza esa es la batalla de Mosul (2016-2017), ya que son ciudades con características muy parecidas. En Mosul (Irak) se libró una de las mayores batallas de la guerra civil iraquí. Fueron ocho meses de combates basados en el cuerpo a cuerpo, en crear fortificaciones de los escombros y en acabar usando civiles como escudos humanos cuando no ya no hay dónde refugiarse.