Los casos más sonados
El 'Kompromat', la técnica de chantaje de origen soviético diseñada para obtener información comprometida
El reciente escándalo del diputado Denis Parfenov pone de nuevo en el centro de atención el uso del 'Kompromat', una práctica que ha sido clave en la política rusa desde la era soviética.
En las últimas semanas, la política rusa ha vuelto a estar en el ojo del huracán tras la filtración de un video íntimo que supuestamente muestra al diputado de la Duma Denis Parfenov en una situación comprometida con una mujer. El video, que ha circulado rápidamente por redes y medios de comunicación, ha sido categóricamente negado por Parfenov, quien asegura que las imágenes fueron manipuladas mediante inteligencia artificial. Sin embargo, su partido político está revisando el material, y la opinión pública rusa ya especula que este es el más reciente ejemplo de 'Kompromat'.
El 'Kompromat' es una técnica de chantaje de origen soviético, diseñada para obtener información comprometida de figuras públicas, utilizada tanto en la política interna como en las relaciones internacionales de Rusia. Aunque Parfenov insiste en su inocencia, el incidente trae a la memoria algunos de los casos más impactantes de 'Kompromat', donde la difusión de imágenes o videos ha tenido consecuencias dramáticas.
Uno de los casos más escandalosos ocurrió en 1999, cuando un video que mostraba al fiscal general ruso, Yury Skuratov, desnudo junto a dos mujeres, fue utilizado para forzar su dimisión. En aquel momento, Skuratov investigaba a la administración del entonces presidente Borís Yeltsin por corrupción. El video, que fue transmitido por un canal cercano al Kremlin bajo el título 'Tres en la cama', puso fin a su carrera política y allanó el camino para que Vladímir Putin, entonces jefe de los servicios de inteligencia rusos, se consolidara en la presidencia. Muchos creen que los propios servicios de inteligencia grabaron y filtraron el video para facilitar la ascensión de Putin al poder.
La oposición a Putin tampoco ha estado exenta de este tipo de maniobras. En 2016, cuando Mikhail Kasyanov, líder opositor, comenzaba a ganar terreno contra el presidente, apareció un video en el que Kasyanov estaba en la cama con una mujer, hablando mal de sus colaboradores. Este 'Kompromat' arruinó su carrera política y eliminó una de las amenazas más serias al Kremlin en ese momento.
El uso de 'Kompromat' no se limita a Rusia. En 2009, Kyle Hatcher, un diplomático estadounidense destinado en la embajada de EE.UU. en Moscú, fue víctima de una filtración similar. Un video, grabado años antes de que Hatcher asumiera su cargo, lo mostraba con una mujer en una habitación de hotel. El incidente afectó su carrera diplomática, demostrando que el 'Kompromat' también puede ser una herramienta en la política internacional.
En otros países, la práctica ha sido replicada. En Paraguay, el senador Juan Carlos Galaverna vio cómo un video comprometedor, difundido por su propio partido, lo obligó a renunciar. Por último, en España, se han difundido fotos del emérito Juan Carlos I y Bárbara Rey besándose. Casos como estos subrayan que, aunque Rusia es conocida por dominar esta técnica, el 'Kompromat' sigue vivo.