Las claves

Mazón se atrinchera, ¿por qué ni el PP, ni el PSOE, ni Vox se atreven a forzar su dimisión?

Sí, pero... Los de Feijóo consideran que las explicaciones de Mazón son suficientes, mientras que los socialistas valencianos proponen un gobierno 'técnico' del PP, comprometido a convocar elecciones en 2025.

A pesar de las crecientes críticas y de algunas voces internas que cuestionan su gestión, el presidente de la Generalitat Valenciana, Carlos Mazón, se mantiene firme en su puesto. La apuesta del PP, parece centrarse en pasar página ante la crisis de la DANA y la reconstrucción, evitando una dimisión que podría tumbar su principal línea de oposición y eximir al Gobierno de cualquier responsabilidad en los errores cometidos.

El Partido Popular se resiste a ceder ante las demandas de cese. Si bien algunos miembros dentro del partido consideran que las explicaciones de Mazón no han sido suficientes, desde Génova se cree que el presidente valenciano ha logrado sortear la presión por el momento. Forzar su marcha implicaría asumir que todos los fallos fueron suyos, lo que dejaría al Gobierno sin los argumentos que tanto han utilizado en su oposición. Además, no hay una alternativa de peso para su relevo dentro del PP, ya que las figuras más destacadas del Consell, como la alcaldesa de Valencia, han renunciado a sus escaños, y un perfil desconocido podría lastrar las opciones del partido en unas futuras elecciones generales.

El escenario para el PP es complejo. Mantener la alcaldía de Valencia es esencial para asegurar la Generalitat en el futuro, y un cambio de liderazgo a corto plazo podría poner en peligro esta estrategia. El partido se enfrenta a un dilema interno: asegurar la continuidad de Mazón, a pesar de los reproches, o arriesgarse a abrir un vacío de poder que podría beneficiar a la izquierda.

Por su parte, los socialistas valencianos tampoco ven la dimisión como una solución. A pesar de las críticas, no exigen la marcha de Mazón, sino que su apuesta es más pragmática. Su propuesta se centra en la creación de un gobierno 'técnico' del PP, comprometido a convocar elecciones en 2025. Solo en caso de que Feijóo rechace rotundamente esta opción, los socialistas se abrirían a la posibilidad de una moción de censura, algo que por ahora parece descartado debido a la legislación que exige que el candidato a la presidencia de la Generalitat sea diputado autonómico. Esta restricción limita las opciones, dado que muchos de los perfiles clave en el PP no están actualmente en Les Corts.

Sin embargo, la caída de Mazón podría abrir la puerta a un gobierno de Vox, cuya abstención sería suficiente para que el PSOE recupere el poder en la Generalitat. Compromís ya ha puesto en evidencia la falta de consenso en torno a la gestión del president, y su propuesta de comisión de investigación deja claro que no habrá complacencia con Mazón. Ante esta situación, los socialistas se ven obligados a posicionarse, pero la idea de entregar el Consell a la izquierda podría ser contraproducente, ya que seguiría jugando en contra de la narrativa del PP, que sigue señalando al presidente Pedro Sánchez como responsable de la crisis.