Más Vale Comer
Qué alimentos elegir y cómo cocinarlos para comer mejor gastando menos
¿Comer mejor y más barato? La clave está en los alimentos, pero también en cómo los cocinamos. Estas son las técnicas más saludables y económicas.
Gastar menos comiendo bien y con los nutrientes adecuados es posible. El nutricionista Luis Alberto Zamora ha explicado en Más Vale Comer cómo lograrlo: la clave está en qué alimentos escogemos, pero también en cómo los cocinamos.
La máxima a la hora de hacer la compra, ha explicado, es que "cada céntimo que gastemos tiene que venir lleno de nutrientes", eligiendo para ello alimentos de alta "densidad nutricional".
Por ejemplo, entre un vaso de leche y un batido de chocolate, aunque ambos son lácteos, por cada 100 calorías de leche obtendremos muchos más nutrientes y, además, por menos dinero. La leche, por tanto, tiene una mayor densidad nutricional.
La clave está en volver al pasado y a los "alimentos de toda la vida", apunta Zamora, que ha explicado que "esos alimentos que tienen que llenar nuestra cesta de la compra para no gastar tanto dinero" son, en resumen, "los que no tienen etiqueta": alimentos frescos, legumbres, verduras...
De entre las proteínas, los huevos "nutricionalmente son un alimento casi perfecto" por un precio bajo. El pescado azul, por su parte, es una fuente de Omega 3 y las conservas "pueden ser una alternativa económica" para obtenerlo.
En cuanto a las legumbres, el experto aconseja volver a los garbanzos y lentejas. De las verduras, el brócoli y las espinacas tienen una mayor densidad nutricional.
Una vez escogidos los alimentos, es fundamental cocinarlos "sin pérdidas" para no perder los nutrientes por los que hemos pagado. En este sentido, Luis Alberto Zamora ha explicado que los tipos de cocinado más económico son también los más saludables:
- El hervido, cuya agua recomienda no tirar para hacer fondos para otros platos.
- La plancha, ya que usa poco aceite de oliva.
- El microondas, que no aumenta las calorías, conserva los jugos de los alimentos no destruye tantos nutrientes.
Por contra, la peor técnica de cocinado es la fritura: no solo nutricionalmente, sino también económicamente por la gran cantidad de aceite que requiere y que a menudo no se puede reutilizar.