Edu Galán tilda de "desmesurada" y "preocupante" la condena a Mongolia: "Ganamos 816 euros y hemos sido condenados a 40.000"

El Tribunal Supremo ha condenado a la revista 'Mongolia' a pagar 40.000 euros a Ortega Cano por "vulnerar su derecho al honor y hacer escarnio de su adicción al alcohol". Una sentencia que, a juicio de Edu Galán, cofundador de la revista, supone "cercenar la libertad artística de quien hace fotomontajes".

"Hemos sido condenados a una cantidad, acusándonos de ánimo de lucro, absolutamente desproporcionada, porque ganamos 816 euros y hemos sido condenados a 40.000", ha explicado.

Por eso, Galán ha afirmado que la cantidad es "desmesurada para una revista independiente que vive de sus lectores": "La justicia de este país parece que está estrechando la libertad de expresión y que está muy ajena a lo juzgado, a la realidad de lo juzgado".

El cartel se componía de un fotomontaje con la cara de Ortega Cano y el cuerpo de un extraterrestre sosteniendo entre sus manos un cartel con el texto "antes riojanos que murcianos" y diciendo "Estamos tan a gustito…". En el fondo del cartel publicitario aparecía un platillo volante en un paisaje aparentemente no terráqueo y acompañado de la leyenda "Viernes de dolores…sábados de resaca".

En ningún momento Ortega Cano autorizó el uso de su imagen para tal fin, según los hechos probados. Y ese es el motivo de la condena. "El auto denota una clara incomprensión de lo que significa la sátira por parte de un juez", ha espetado Galán, que ha asegurado que le "preocupa" que la justicia en España les esté dejando realmente "desprotegidos".

Mongolia recurrirá la sentencia al Tribunal Constitucional y, si se requiere, al Tribunal Europeo de Derechos Humanos. "Esto va mucho más allá del justo, es de tener un país avanzado en materia de libertad de expresión", ha añadido el cofundador de la revista.

El objetivo, ha dicho, es que la justicia entienda que tienen derecho a satirizar a personajes públicos en el momento en el que están de actualidad. "Si no entendemos esto, nadie podría hacer sátira porque tendríamos que pedir consentimiento al personaje satirizado. No tiene ningún sentido. Otra cosa es que te guste más o menos, pero es un personaje criticable", ha reiterado.