Análisis de Luis Quevedo
¿Por qué importan más los trombos de personas vacunadas con Janssen y AstraZeneca?
El divulgador científico Luis Quevedo repasa en Más Vale Tarde las diferencias en los trombos que han sufrido las personas vacunadas con AstraZeneca, con Janssen, con Moderna y con Pfizer.
La Unión Europea podría no renovar desde 2022 los contratos con AstraZeneca y Jenssen para adquirir sus vacunas contra el coronavirus tras las polémicas generadas sobre su uso al registrarse casos de trombos. Pero estas no son las únicas dosis que han notificado casos de coágulos sanguíneos raros tras su inyección.
El divulgador científico Luis Quevedo ha explicado en Más Vale Tarde cómo está la situación con el resto de vacunas. Por orden, la de AstraZeneca es la que más casos de trombos ha notificado, un total de 222. Le siguen la de Pfizer, que ha registrado 35 casos; la de Janssen, seis en Estados Unidos, y la de Moderna ha contabilizado cinco.
Las diferencias importantes son que en el caso de los trombos generados en personas que han recibido la vacuna de AstraZeneca se ha confirmado una relación de causalidad. En el caso de la vacuna de Janssen esto es algo que se está investigando, mientras que los trombos notificados en personas vacunadas con Pfizer y Moderna no parecen representar esa causalidad. Es decir, unos estarían provocados por los efectos de las vacunas y los otros no, o al menos no está demostrado.
La tecnología con la que se fabrican estas vacunas parece ser una de las claves. Las de Pfizer y Moderna usan el ARN mensajero, pero las de AstraZeneca y Janssen usan el método de Adenovirus para transportar la vacuna.
Con todo, la Agencia Europea del Medicamento sigue defendiendo el uso de cualquiera de estas vacunas aprobadas, y es que el riesgo que supone sufrir un trombo raro al inyectarse la vacuna es menor que el beneficio que esta reporta.