La vacuna de la varicela trae de cabeza a cientos de padres

Miles de padres en España andan a la caza y captura de la vacuna de la varicela. A día de hoy son una auténtica plaga y confiesan estar hartos. Desde enero, tras el veto de Sanidad, se dan situaciones surrealistas.

Se sienten en una especie de limbo sanitario. Un quiero y no puedo que han paliado cruzando la frontera. En las farmacias de Portugal hay, directamente, lista de espera. Es el remedio a una prohibición nacional que, sin embargo, tiene sus pequeñas lagunas.

Navarra es, en la península, el último reducto. Hace un mes se quedaron sin reservas. Son destino final del llamado turismo de varicela, un tráfico de vacunas con sus propios controles internos.

Aunque ya vaticinan que el año que viene tampoco se librarán del veto. Temen tener que cumplir también con este calendario de vacunación infantil que tanta polémica está generando.

Carlos es uno de los pediatras que más está combatiendo la medida de Sanidad. En Valencia la Consejería de Sanidad habla de "problema social". Y los expertos no solo alertan de los peligros de una vacuna inservible.

A medida que pasa el tiempo, crece la tensión. En Galicia hay una auténtica epidemia de padres angustiados, con un nuevo foco de preocupación.

Y entendiendo que Sanidad no toma medidas a la ligera, cada vez son más padres los que reclaman las vacunas de sus hijos dejen de estar en cuarentena.