Descubrió una nueva motivación
La rutina que Beatriz Flamini repitió durante 500 días en la cueva: "Me motivaba escribir, leer, tejer y pintar"
La deportista se levantaba todos los días y seguía siendo de noche, pero aún así ella tenia muy claro cuáles eran sus motivaciones dentro de la cueva, según ha confesado en directo.
La deportista Beatriz Flamini reconoce que antes de entrar en la cueva se veía débil mentalmente y emocionalmente. Así, señala que para ella fue importante poder llevarse cosas que le motivasen e incluso de noche, pues para ella siempre eran las cuatro de la mañana.
"Decidí meterme en la cueva y la fortaleza está ahí, en el entrenamiento. A la hora de levantarte siempre es de noche y me motivaba mucho escribir, leer, tejer y pintar, que era algo con lo que no contaba pero he descubierto", ha explicado en Más Vale Tarde.
Así, reconoce que para ella era importante poder expresar en un dibujo lo que estaba ocurriendo día a día dentro la cueva. "Eso lo que hace es plantarte en una concentración de tiempo. El truco está en poder tener a tu alcance las cosas que te motivan", añade.