Gritos, comida por el suelo y mucha paciencia fue lo que tuvo que afrontar el chef Alberto Chicote en 'El Bodegón'

Ana: "Si no ponemos las gulas, nos cortas las orejas"

Alberto Chicote llegó a 'El Bodegón' para degustar sus platos y ver dónde fallaba el restaurante. Los berberechos tenían tierra, al bacalao le sobraban las gulas y el rabo de toro estaba pasado de cocción. Y es que, a pesar de que Abraham alagaba al chef, las críticas se las llevaba igual.

"Cuando hay algo en las cámaras que no me gusta, llamo para poner orden"

Después, el chef de Pesadilla en la cocina echó un vistazo al restaurante. Vio dónde se almacenaban las patatas, las cámaras con un cochinillo en el suelo y el rabo de toro congelado y el despacho de Abraham, el lugar en el que vigilaba a sus trabajadores con cámaras de seguridad.

"Si no estoy con el látigo y la metralleta, esto no funciona"

Chicote quiso también ver el servicio de comidas para evaluar el trabajo de Abraham y Ana. El comedor estaba a rebosar y los trabajadores con las comandas no se aclaraban. Motivo por el cual, Abraham comenzaba a gritar porque aseguraba que para trabajar bien, "necesitan tensión".

"Hay una diferencia muy importante entre ser un director y un dictador"

La paciencia de Alberto Chicote tuvo un límite, y Abraham lo sobrepasó. Con tanto grito y con su actitud, el chef tuvo claro que es lo que fallaba en el restaurante, pero necesitaba un respiro: "¿Puedes dejar de taladrarme el cerebro?". Y es que, para ver espectáculos, se va al "circo".

Chicote: "No eres un líder, eres un tirano"

A la vista de la situación, el chef Chicote convocó un gabinete de crisis para que los trabajadores de 'El Bodegón' dieran su opinión sobre lo que fallaba en el restaurante. Todos coincidieron en que el principal problema era la autoridad de Abraham, que no se tomaba demasiado bien las críticas: "Quien quiera irse, ahí tiene la puerta".

La nueva terraza de 'El Bodegón'

Llegó la hora de reformar el local y el equipo de Alberto Chicote empezó con la terraza para diferenciar 'El Bodegón' de cualquier restaurante de la zona. Un diseño que se creó con mucha luz para atraer a la gente. Cuando se iluminaba "era la bomba", aseguró el chef.

"¿Ya estás con las putas fotos?"

Al servicio de cenas del renovado 'Bodegón' llegó una visita inesperada: la del torero Miguel Abellán. Una oportunidad para que Abraham le enseñase la foto que se hizo con él hace unos años y para dejar de lado su labor en el comedor. Mientras, en la cocina, Ana comenzaba a bloquearse.

"Estoy ahora mismo que no doy 'pie con bola'"

La cocinera del restaurante, Ana, se empezaba a bloquear con las comandas y su tarea se le fue de las manos. Por esa razón, Abraham volvió a recaer y entró a gritos en la cocina, acaparando las funciones de su mujer. La ayuda de Chicote se hizo indispensable para que la propietaria dominase la situación.

Chicote: "Para toda esa gente, eres un bocazas y un payaso"

Por último, el servicio de comidas fue de "cero". Abraham no dejó de gritar en la cocina, a pesar de que, tras la repartición de tareas de Chicote, su lugar era el comedor. Faltaba comida y eso ponía de los nervios al propietario que no dejó de gritar. Voces que también llegaron a los clientes.