EDUARDO MARTÍN, DELEGADO DEL SINDICATO CFDT DE ARCELOR MITTAL FLORANGE
“Tenemos que dar el gusto de soñar a los jóvenes”
Jordi Évole le cuenta a Eduardo Martín, delegado del sindicato CFDT de Arcelor Mittal Florange, la historia de Manu Rodríguez, licenciado en Comunicación Audiovisual que más tarde hizo un Doctorado Teoría, Análisis y Documentación Cinematográfica y ahora trabaja en una tienda de relojes. A Eduardo le da pena y resalta la importancia de soñar.
En 2012, Arcelor cerró su fábrica de Madrid tras dos años y medio de paradas temporales. Cuando llegó a Francia, con la notica los trabajadores se dividieron. Unos pensaban que si había pasado en Madrid era mejor que a ellos les hubiera tocado, pero había otros que pensaban que si había cerrado la de España también les podía tocar a ellos.
Jordi Évole le explica a Eduardo Martín, delegado del sindicato CFDT de Arcelor Mittal Florange, la situación de Nissan donde a los trabajadores les amenazan que si no se bajan el sueldo y aceptan las condiciones la producción de la Nissan se puede ir a otro país como Marruecos o Sudáfrica.
En Mittal, el francés asegura que pasa lo mismo, pero les amenazan con España. Es decir para ellos es España como para los españoles Sudáfrica. “Siempre buscan un lugar del mundo donde el trabajador sea más barato”, explica el delegado del sindicato CFDT de Arcelor Mittal Florange.
La victoria de los trabajadores de la siderúrgica cree Eduardo que ha perjudicado a otros países. “Me parece que lo que hemos conseguido ha sido a costa de trabajadores de Bélgica”, explica.
El francés confiesa que está cansado de los revolucionarios del Facebook. Esas personas que están en su casa dándonos consejos y haciendo “revolución por Facebook”. “Nosotros lo que queremos son actores. “¿Quieres revolución? ¿Quieres que el mundo cambie? Pues empieza por cambiar tu propio mundo y ven con nosotros a la calle”. Comenta que “lo fácil es no luchar” pero que hay que hacer sacrificios.
Jordi le cuenta la historia de Manu Rodríguez que estudió Comunicación Audiovisual, más tarde hizo un Doctorado Teoría, Análisis y Documentación Cinematográfica y ahora trabaja en una tienda de relojes. A Eduardo le da pena. “Tenemos que dar el gusto de soñar a los jóvenes y soñar no es voy a vivir 20 años con 1.200 euros. Soñar es ‘yo quiero que esta sociedad cambie’ y el sueño nos ayuda a avanzar”, concluye el delegado.
Valencia, día uno
Un alcalde 'popular' justifica la comida de Mazón: "Quiero pensar que nadie le comunicó que Utiel se estaba inundando"
El regidor de la localidad cree que si el president no canceló su agenda fue porque desconocía la situación que él había definido en Á Punt como "dantesca": "Otra cosa no me cabe en la cabeza".