Así consiguió un policía jubilado que las asesinas de Isabel Carrasco fueran detenidas en apenas 17 minutos

laSexta Columna reconstruye el momento en que, convencida de que Isabel Carrasco le había arruinado la vida, una persona llegó al puente del río Bernesga hace ahora 10 años y asesinó a la presidenta de la Diputación de León. Los únicos testigos del crimen fueron un policía jubilado y su mujer.

El periodista Javier Calvo explica en el vídeo sobre estas líneas que, tras descerrajar tres tiros sobre Carrasco y con mucha sangre fría, la autora de los disparos antes de huir tiene tiempo de mirar a los ojos a esos testigos del crimen. "Le mira y se vuelve a echar la mano al bolso, y vuelve a empuñar el arma, como diciendo 'quieto'", comenta el periodista Javier Calvo. Según declaró el propio testigo, "yo pensaba que me iba a dar un tiro".

Los minutos siguientes son de mucha tensión. Mientras el policía retirado decide perseguir a la asesina por las calles de León, su mujer llama al 112. Cuando llega la policía, el testigo señaló a la autora de los disparos. En ese momento apareció en la escena la hija de la asesina, Triana, que primero se presentó como la hija del comisario de Astorga y luego aseguró que venía de una confitería. Sin embargo, cuando el policía comprueba la coartada, explica Calvo, "se da cuenta que la confitería está cerrada, que los lunes no abre".

Han pasado 17 minutos desde los disparos mortales y las presuntas culpables ya están detenidas. Son Montserrat González, autora de los disparos, y Triana Martínez, su hija y cómplice. "Si no es por este policía casi jubilado que, pese a todo, la sigue, hubiera sido muy difícil, por no decir imposible, que se hubiera descubierto quiénes eran las autoras", llegó a afirmar el fiscal durante el juicio.