No soy un Judas

Mientras, en Woodbury, el Gobernador está preparando todo para formar un ejército con todos los habitantes. Quiere que estén fuertes ante el equipo de Rick.

Andrea, asustada, decide abandonar Woodbury con la ayuda de Milton, para ver a Rick e intentar hacerle entrar en razón para que firmen la paz con el Gobernador.

Cuando Milton ayuda a Andrea a escapar, se encuentran a Sasha, Tyreese, Allen y Ben. Ellos les preguntan dónde están viviendo, y al responderles que en una ciudad amurallada, deciden ir con Milton a Woodbury, y Andrea decide seguir su camino sola.

Una vez Andrea consigue llegar a la prisión, todos le tratan como una desconocida, y ella, cegada por Philippe, no consigue  hacer entrar en razón a todos para que no tengan problemas con todo el pueblo de Woodbury. Sólo Carol, como buena amiga de ella, le habló claro, y de la forma más sincera le pidió que frenase al Gobernador, dándole la mejor noche de su vida...