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PRACTICA DIFERENTES RITMOS
Con este entrenamiento Google Fit nos indicará en el momento adecuado la velocidad a la que debemos caminar.
Caminar es una de las actividades físicas más sencillas de realizar, solo necesitas unas zapatillas y una buena disposición. Si quieres hacer un seguimiento de la actividad y de la evolución, siempre podemos hacer uso de pulseras o relojes inteligentes. Aunque si lo prefieres, puedes usar Google Fit en tu móvil. Así puedes programar tus entrenamientos.
Una buena forma de cuidar y mejorar nuestra salud es realizando actividad física de forma frecuente. Encontrar una actividad que nos permita ser constantes a veces es complicado, por lo que caminar y pasar se ha convertido en una buena opción. A través de la app, no solo podemos registrar los recorridos, el número de pasos y la distancia recorrida. También tenemos la opción de medir tanto la frecuencia cardiaca como la respiratoria. Pero si lo que quieres es sacar el máximo partido a la actividad, puedes hacer uso de una función de los más interesante, que nos ayuda a mantener un ritmo constante. De manera que logramos una mayor eficiencia en nuestros entrenos.
De manera que puedes elegir el ritmo al que quieres caminar, y podrás mantenerlo fácilmente siguiendo las señales acústicas que emite el teléfono. Para ello, pulsa sobre “camina al ritmo que elijas”. Realizando una marcha ligera, alcanzaremos nuestros objetivos diarios de pasos de forma sencilla.
Gracias al ritmo que nos marca la aplicación el número de pasos es de unos cien por minutos, lo que hace que la frecuencia cardiaca aumenta y que terminemos jadeando por la exigencia del mismo. Solo tenemos que caminar siguiendo las señales, que seguirán sonando de fondo incluso si mientras realizamos la actividad escuchamos música o un podcast.
La actividad comienza en los 100 pasos, algo que podemos cambiar, pulsando sobre los botones “+” y “-“ para aumentar o disminuir el ritmo. Incluso tenemos la opción de elegir el tipo de actividad que vamos a realizar, ya sea ciclismo, caminata, andar en cinta, correr o incluso con circuitos de entrenamiento.
Durante el desarrollo de la actividad, podemos adecuar el ritmo a nuestras necesidades, ya sea aumentando el ritmo o disminuyéndolo si es demasiado alto. Una vez concluida la actividad, obtenemos un resumen con todos los parámetros registrados, distancia, tiempo, energía gastada e incluso la elevación del terreno si en nuestro recorrido es en zona de montaña.