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UN AJUSTE ESCONDIDO
Con este ajuste en el que nos fijamos hoy, podemos añadirle una capa extra de protección a tu teléfono.
Nuestros dispositivos móviles recogen gran cantidad de información importante sin que nos demos cuenta. Esta información puede ser compartida por las aplicaciones con terceros, algo que significa una clara violación de nuestra privacidad. Para que esto no suceda, debemos revisar de forma precisa las opciones de privacidad y activar algunos ajustes. Estos no se encuentran a simple vista, te ayudamos a encontrarlos.
Los permisos de ubicación, permiten o limitan el acceso de las aplicaciones a tu posición exacta, de manera que si no queremos que sepan dónde estamos, siempre podemos retirarlos. Algo que no pasa con los dispositivos a los que nos conectamos. Hace años Android hace uso de los permisos “dispositivos cercanos”, un permiso más limitado de la ubicación que se usa cuando nos conectamos a otros dispositivos Bluetooth. Aunque de esta forma las apps, no conocen nuestra ubicación, no podemos impedir que a través de otros dispositivos cercanos que, si tengan activada la ubicación, puedan saber dónde nos encontramos, simplemente a través de nuestra conexión Bluetooth.
Si a esto le unimos otras informaciones como la distancia a la que nos encontramos de otros dispositivos Bluetooth, las redes wifi o las antenas de telefonía a la que nos hemos conectado, es posible ubicarnos en el lugar preciso en el que nos encontramos. Algo que evitamos, simplemente, retirando el permiso a las apps. Aunque no sucede lo mismo con las apps predeterminadas del sistema, estás a menudo, no pueden desinstalarse y tienen acceso sin limitación alguna a la ubicación, sin necesidad de pedir permiso.
Al inhabilitar esta opción, puede que afecte a alguna funcionalidad muy específica, aunque no notarás la diferencia en el uso general del dispositivo. Aunque muchas apps tienen permiso de acceso, realmente no es necesario y privarlas de ello, no afecta en nada al rendimiento del teléfono, por lo que puedes desactivarlas sin programas. En el caso de que este permiso fuera necesario, para el correcto funcionamiento, el sistema nos solicitará acceso. Aunque siempre podemos volver a desactivarlo cuando no vayamos a hacer uso de la app o esa característica en cuestión. Por lo que debemos decidir, en cada momento, que priorizar la privacidad de los datos y la funcionalidad. Por lo que antes de otorgar permisos, debemos asegurarnos de que no se trata de una app maliciosa, o del tratamiento de nuestros datos.