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Google ya trabaja en una solución
Lamentablemente casi todas las semanas nos encontramos con alguno de estos problemas relacionados con la seguridad de nuestros móviles Android. Y lo más preocupante de todo, es que no se trata de apps que se descargan de forma fraudulenta desde sitios sospechosos, de los que podemos esperar este tipo de cosas, sino que una vez más hablamos de apps descargadas desde las tiendas oficiales. En este caso hablamos de la Play Store de Google, que en esta ocasión ha visto como más de diez mil apps han estado recopilando datos de los usuarios incluso después de que estos les han negado los permisos a estas apps.
Ni siquiera evitando dar los permisos
Hace años que Android introdujo los permisos para las apps. Antes las aplicaciones podían acceder a todos los recovecos de nuestro móvil sin problema alguno. Nos podíamos encontrar que apps que no debían hacer uso alguno de la cámara la utilizaban y cosas por el estilo. Pero en tras la llegada de los permisos solo son los usuarios los que los brindan a las apps, por lo que una app no puede acceder a nuestro información salvo que nosotros se lo permitamos. Aunque no siempre es así, tal y como hemos conocido ahora con miles de apps Android.
Una investigación ha determinado que son exactamente 1.325 las apps de Google Play que han estado robando datos de los usuarios que tiene que ver con las conexiones Wifi, los metadatos almacenados en las fotos de estos y otros aspectos de la información que se guarda en un móvil, y que ha quedado al descubierto en esta ocasión para esas más de mil apps. Concretamente una popular app de edición de fotos llamada Shutterfly, ha estado recopilando datos de los usuarios, como de la ubicación de las fotos realizadas en el móvil, que era enviada de nuevo a los servidores de la app. Otras apps por ejemplo han estado escaneando las tarjetas microSD de los móviles en busca de archivos no protegidos, que han estado enviando también a los servidores de los desarrolladores. Lo peor de todo, ya no es que roben los datos, que ya de por sí es grave, sino que esto se ha producido después de que los usuarios de estos móviles afectados en su gran mayoría no le hayan concedido permiso alguno a estas apps para poder merodear por su teléfono y su sistema de archivos.
Por lo que hemos conocido, parece que Google está al tanto de estas prácticas, y está trabajando en una solución que implementará en Android Q, y que evitará que los desarrolladores utilicen sus malas artes para poder robar datos. En cualquier caso nadie estamos exentos de caer en las garras de una app de este tipo, pero siempre tenemos la opción de prescindir de apps de dudosa reputación, o de la que no podemos recoger la suficiente información fiable acerca de su funcionamiento. Así que ya sabéis, a veces, ni denegar los permisos nos va a evitar sufrir uno de estos robos.