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Apps
Al cabo del año pueden ser decenas las apps que descargamos e instalamos en nuestros móviles. Después estas deben actualizarse regularmente, algunas lo hacen casi todas las semanas, otras una vez al mes, pero la realidad es que a la semana lo normal es que al menos haya una decena de apps que se hayan actualizado. Si la media de una app y su actualización puede pesar 20 o 30 megas, estamos hablando de que en el caso de que se tengan que descargar todas con los datos móviles el consumo total de datos pueda llegar nada menos que 200, 300 o 400 megas. Algo bastante importante si tu bono de datos no es muy grande. Pues bien hay una forma de evitar este gasto de datos con un sencillo truco.
Veta las actualizaciones cuando no hay Wifi
Es algo muy cómodo, sobre todo cuando tenemos activadas las descargas automáticas. Ya que no tenemos que estar pendientes de que una actualización nueva haya llegado a una app y que esta se instale. Pero como todo, es un arma de doble filo, y en esta ocasión si no lo controlamos podemos encontrarnos con una desagradable sorpresa al final del mes en la factura de nuestro operador, o bien quedarnos sin datos antes de tiempo y pasar a tener una velocidad de descarga ínfima.
Para ello podemos evitar que las apps se descarguen cuando estamos lejos del Wifi, recurriendo a nuestro bono de datos. Para ello debemos pedirle a nuestro móvil que las descargas se realicen única y exclusivamente cuando estamos conectados a una red Wifi. Lo que ocurrirá entonces es que todas las actualizaciones de apps se quedarán paralizadas, y no se retomarán hasta que tengamos conexión a través de una de estas redes Wifi. Pues bien, para evitar que las apps descarguen sus actualizaciones en una red móvil, hay que hacer lo siguiente:
En este último caso si elegimos la primera opción las actualizaciones se seguirán descargando, pero solo cuando haya una conexión Wifi activa. En el caso de la segunda opción se detendrán por completo las actualizaciones, y no podremos instalarlas hasta que lo hagamos de forma manual, entrando en cada una de las apps en la Play Store y pulsando sobre “Actualizar” de esta manera. Por tanto con ambas opciones evitamos que se descarguen las apps cuando tengamos una conexión de datos móviles activa.
De esta forma no hay un gasto en datos que pueda acabar con él antes de tiempo. Aunque lo más recomendable es elegir que se realicen solo por Wifi, ya que prácticamente sin darnos cuenta veremos cómo las apps se mantienen actualizadas sin necesidad de gasto de dato móvil alguno. Es verdad que cada día contamos con más datos en nuestros bonos, pero si somos de los que tenemos muchas apps instaladas puede que nos llevemos una desagradable sorpresa antes de finalizar el mes, con cientos de megas desperdiciadas por actualizar unas apps que lo habrían hecho minutos después en la red Wifi de nuestra casa.