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MUCHO CUIDADO
Esta medusa, cuyo nombre científico es Pelagia noctiluca, destaca por su capacidad de bioluminiscencia, que le permite emitir destellos de luz azulada.
Las playas españolas se enfrentan una nueva amenaza marina: la medusa clavel del mar (Pelagia noctiluca), una especie pequeña pero muy temida, cuya presencia se ha incrementado notablemente en las últimas semanas.
Las zonas más afectadas hasta el momento son Murcia, Alicante, Torrevieja y alrededores. También se han reportado casos en Almería y otras playas andaluzas. El fenómeno responde a un aumento de la temperatura del agua, que está atrayendo a esta especie hacia zonas más cercanas a la costa.
Según el Oceanogràfic de València, la medusa clavel del mar mide entre 4 y 12 centímetros de diámetro. Sus tentáculos contienen células urticantes capaces de causar dolor intenso, irritación y reacciones alérgicas, especialmente en personas sensibles.
Además, una de sus características más llamativas es su capacidad de bioluminiscencia: puede emitir luz en la oscuridad, un fenómeno que se percibe especialmente durante inmersiones nocturnas o en condiciones de baja luz.
Tal y como revelan desde el CSIC, existe una serie de pasos a seguir ante una picadura de Pelagia noctiluca:
Para evitar en la medida de lo posible la picadura de cualquier tipo de medusa, existe MedusApp, una aplicación gratuita que permite consultar avistamientos de medusas en tiempo real, reportar encuentros y acceder a consejos sobre cómo actuar ante una picadura.
Muchas playas ya han comenzado a izar la bandera morada, que indica la presencia de medusas, y han reforzado los avisos desde los puestos de socorro. Se recomienda consultar el estado del mar antes de bañarse, y no tocar ejemplares varados, ya que sus tentáculos pueden seguir siendo peligrosos incluso después de muertos.