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LLEGÓ A PESAR 165 KILOS
El checo tenía 36 años y era conocido por su disciplina para alcanzar su sueño de suceder a Arnold Schwarzenegger y Sylvester Stallone.
Illia Golem, conocido como "The Mutant" por su monstruoso cuerpo, ha muerto a los 36 años de forma repentina. Su cuerpo era uno de los más impactantes del mundo: medía 1,85 metros y llegó a pesar 165 kilos. Las causas de su muerte todavía son desconocidas.
El checo, que se convirtió en uno de los culturistas más reconocidos de Estados Unidos, aseguró que su meta de pequeño era llegar a ser como Arnold Schwarzenegger y Sylvester Stallone.
Pero si había algo por lo que Golem destacaba era por su peligrosa dieta. Se sabe que tomaba 7 comidas al día, con las que sumaba un total de 16.500 calorías. Para hacernos una idea, los hombres generalmente no deben tomar más de 3.000 calorías en un día. Sin duda, el consumo de Illia Gollem era realmente desproporcionado, que quintuplicaba las calorías aconsejables.
Sobre todo, comía carne y sushi, llegando a ingerir más de 100 piezas de sushi al día, lo cual supone 1,6 kilos de arroz. También tomaba grandes cantidades de salmón, pasta e incluso helado.
Además, para lograr su físico exuberante y alcanzar el crecimiento de los músculos, se inyectaba insulina, hasta 50 dosis para quemar rápido los alimentos. Sumado a todo eso, se administraba Synthol, una peligrosa sustancia utilizada a menudo para hacer que el volumen de sus músculos crecieran de manera artificial.
A lo largo de su carrera, logró levantar 272 kilos en press de banca y 317 en peso muerto, convirtiéndose en una figura imponente del fisicoculturismo.