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MÁS QUE PARÍS, LONDRES O BERLÍN, SEGÚN FOTOS TOMADAS DESDE EL ESPACIO
Tratamos de alargar el día de forma artificial porque la luz nos da sensación de seguridad. Pensamos que si iluminamos mucho será más difícil que nos atraquen y habrá menos accidentes de tráfico.
Sin embargo, ni eso es del todo así, ni todas las ciudades brillan igual.
Madrid brilla tres veces y media más que Berlín y en la capital alemana no hay más criminalidad ni más accidentes de tráfico.
El color de la luz depende del tipo de tecnología que utilicen las farolas. Las naranjas de luz cálida son de vapor de sodio de alta presión. Esta es la luz que predomina en Madrid, especialmente a partir de las 12 de la noche, cuando se apagan las luces de los monumentos y el tráfico llega a su mínimo.
La iluminación de Berlín, sin embargo, es de dos colores. Eso se debe a que Berlín del oeste ha ido modernizando su iluminación, pero en Berlín del este se mantienen las lámparas de gas por memoria histórica.
¿Qué es mejor? Según astrónomos, médicos y biólogos, por la noche es preferible usar luz cálida antes que luz fría y, en la medida de lo posible, dormir en la oscuridad.
A mí me tienen convencida. ¿Te vienes al lado oscuro?