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UN NOMBRE SUGERENTE PARA UN FENÓMENO MUY CURIOSO
Seguro que al escuchar la palabra “cenicienta” os viene a la cabeza el archiconocido cuento de los hermanos Grimm. Pero como habréis supuesto, no vamos a analizar el cuento, sino un fenómeno astronómico que se puede observar en la Luna llamado “luz cenicienta”.
Si desde nuestro planeta cada cierto tiempo podemos apreciar la Luna en estado de llena, ¿habéis pensado si desde la Luna se podría llegar a ver una “Tierra llena”? La respuesta es sí. Ahora bien, ¿cuándo se podrá apreciar esta “Tierra llena”?
Sabemos que la Luna llena se produce cuando están en la misma línea el Sol, la Tierra y la Luna, en ese orden. Así pues para apreciar una Tierra llena desde la Luna, la alineación que se debería de tener es: Sol, Luna y Tierra, es decir, condiciones de Luna nueva desde la Tierra.
La Tierra llena tendría, vista desde nuestro satélite, unas 13 veces más superficie de la Luna vista desde aquí y su luminosidad sería unas 60 veces superior a la que refleja nuestra Luna vista desde nuestro planeta. Es un poco lioso de entender, pero dicho de manera rápida: la Tierra llena ilumina unas 60 veces más que la Luna llena.
¿Qué ocurre cuando en la Tierra tenemos Luna llena? Las noches son más claras porque la Luna llena ilumina los suelos nocturnos de nuestro planeta, aunque para apreciarlo hay que salir al campo. En los pueblos y ciudades no se aprecia el efecto.
Análogamente, la Tierra llena ilumina la superficie de la Luna, y aquí entra en juego un parámetro llamado “albedo”, que es el porcentaje de radiación que una superficie refleja respecto a la radiación que incide sobre ella. Es bien sabido que el color blanco es el que más refleja, por lo tanto, la Tierra reflejaría más luz cuando más blanca sea, es decir, cuando más nubes tengamos en la parte reflectante.
¿Y desde nuestro planeta podemos ver el reflejo de la propia Tierra sobre los suelos nocturnos de la Luna? La respuesta vuelve a ser sí. A partir de mañana la Luna está en fase creciente y durante cuatro días al anochecer podremos apreciar como una Tierra casi llena ilumina nuestro satélite. Concretamente es la luz reflejada de la mayor parte Océano Pacífico la que ilumina nuestro satélite y, cuando más nubes haya, más luz se reflejará (pero más difícil será verlo).
¿Cómo podemos apreciar el reflejo de la Tierra en la Luna? Obviamente apreciaremos una porción de Luna iluminada por la luz directa de Sol, la correspondiente a su fase creciente. Pero si nos detenemos un poco, podremos apreciar el resto del disco lunar tenuemente iluminado precisamente por la luz reflejada del Océano Pacífico.
Y esta luz reflejada es lo que se conoce como luz cenicienta: el reflejo de la Tierra reflejado sobre la superficie de la Luna. Y como en el cuento, a medianoche habrá desaparecido porque nuestro satélite ya estará bajo el horizonte.