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DIFERENTES FORMAS Y TAMAÑOS
Las nubes pueden estar más arriba o más cerca de la Tierra, pero siempre flotando. ¿Será que no pesan nada? No, sí pesan, y bastante.
Cuando miramos al cielo, a no ser que esté muy claro, siempre hay alguna nube. Estas agrupaciones de partículas se mueven y son las encargadas de emitir las precipitaciones como lluvia, nieve o granizo. Al verlas tan "esponjosas" puede parecer que no pesan, pero lo cierto es que no es así.
Las nubes están compuestas, principalmente, de aire y pequeñas partículas de agua, que se encuentra condensada. Y, al igual que el aire, estas estructuras también pesan. Entonces, ¿por qué flotan? La respuesta reside en que la densidad del mismo volumen que una nube es menor que la densidad de aire seco, por eso flotan en el aire.
Pero, ¿cómo se calcula cuánto pesa una nube? Hace años, la científica Margaret LeMone calculó cuánto pesaría una nube. Para hacerlo, primero midió el tamaño de la sombra de la nube y estimó su altura, como si esta tuviera una forma cúbica. Después, estimó que la densidad de las gotas de agua era de alrededor de 0,5 gramos por metro cúbico, según 'Live Science'.
Por tanto, LeMone calculó que si una nube tenía un kilómetro cúbico de densidad y se multiplicaba por los gramos que pesan las partículas de agua, en una nube así habría 500.000.000 gramos de gotas de agua. Eso serían alrededor de 550 toneladas: más de 227 elefantes juntos de aproximadamente 2.200 kilogramos cada uno.