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LA CALIDAD DE LA SALUD QUE SE OBTIENE ES SIMILAR EN CUALQUIER CASO

¿Adelgazar rápido o despacio? Estos son los pros y los contras de las dietas exprés

Una pérdida más rápida de peso reduce antes los niveles de obesidad, pero no mejora necesariamente la salud más que otros métodos. Un estudio analizó la calidad de esta en 11.000 pacientes de un programa de control de peso y no encontró diferencias. Además, perder menos de un kilo a la semana en vez de más protege al cuerpo de los cálculos biliares

¿Pensando en hacer una dieta exprés? No es para tanto Pixabay

Algunas personas (sobre todo nutricionistas) oyen hablar de “dieta milagro” o “dieta exprés” y saben lo que hay detrás del concepto: pasar hambre, subidas rápidas de peso por el efecto rebote… Este tipo de dietas, en las que se pierde una gran cantidad de kilos en poco tiempo, son desaconsejadas. Ahora, un nuevo estudio da más argumentos para ello.

Una investigación de la Universidad de York, en Toronto (Canadá), ha indagado en las ventajas y las desventajas de las llamadas dietas milagro o exprés. Para ello, analizaron a 11.283 personas que participaban en un programa público de control de peso, de julio de 2008 a julio de 2017. Al analizar los datos, descubrieron que aquellas personas que habían perdido peso más rápido que otras que lo habían hecho más lento tenían la misma calidad de salud. Es decir, que no había beneficios extra para darse prisa.

La única ventaja es que aquellas personas que perdía peso más rápido reducían su obesidad en un porcentaje mayor. Sin embargo, cuando se ajustaban las pérdidas absolutas de peso de los dos grupos, se comprobaba, como hemos dicho antes, que su calidad de vida era igual.

Otra de las ventajas de la pérdida de peso lenta, de una a dos libras por semana (453 a 907 gramos semanales), es que se reduce el riesgo de sufrir cálculos biliares, algo que sí puede suceder en pérdidas de peso mayores. Estos cálculos son piedras que se forman en la vesícula, y en cuya formación influye la obesidad o la diabetes, pero también la pérdida acelerada de peso.

Para Jennifer Kik, profesora asociada de la Facultad de Salud de la Universidad de York y directora del estudio, este hallazgo viene a demostrar que hay que enfocarse en un control del peso “a largo plazo” y que la pérdida de peso ha de estar sostenida en la cantidad antes recomendada, en menos de un kilo por semana.