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Y TAMBIÉN LAS MUERTES POR ENFERMEDADES CARDÍACAS
Los ciudadanos que acuden en bicicleta al trabajo tienen un menor riesgo -el 41%- de fallecer en comparación con aquellos que se desplazan en coche o en transporte público, según un estudio del Instituto de Ciencias Cardiovasculares y Medicina de la Universidad de Glasgow.
Sin embargo, los investigadores avanzaron que utilizar la bici también reduce el riesgo –un 52% menor- de fallecer por una enfermedad cardíaca o de cáncer –un 40% menos-.
De hecho, su estudio asegura que la bicicleta como medio de transporte de casa a la oficina incluso rebaja al 45% el riesgo de padecer cualquier tipo de cáncer.
El estudio de la Universidad de Glasgow también evalúo si estas ratios se mantienen cuando en lugar de la bicicleta se va caminando.
En este sentido, los investigadores aseguran que los porcentajes casi caen a la mitad –el riesgo de mortalidad es mayor- entre los ciudadanos que pasean para ir a trabajar y los que montan en bici.
El motivo de estas diferencias es obvio. Una persona que acude andando a la oficina suele acometer distancias más cortas que otra que viaja en bici –vehículo que proporciona un desplazamiento más largo-.
“Es posible que para caminar se necesiten distancias largas para obtener beneficios significativos en la salud. Y puede ser que los porcentajes de riesgo de muerte sean mayores también por el hecho de que pasear es una actividad menos intensa que la de montar en bici”, finalizan.
En su investigación, publicada en el British Medical Journal, recomiendan a los ayuntamientos y administraciones en general que fomentar la bicicleta como medio de transporte sea una de las prioridades dentro de sus políticas de movilidad.