TecnoXplora » CienciaXplora » Divulgación

¿HAS COMPRADO ALGUNO DE ESTOS FRAUDES?

La ciencia de la estafa: ranking de productos milagro

Desde babas a anisetes, aparatos eléctricos sin efectos, arandelas y procesos químicos imposibles. Todo vale para vender a quien quiere comprar.

Efecto de las cintas kinesiológicas Antena3.com

La mejor prueba de que la medicina basada en el método científico es la más eficaz es que los maestros de las pseudomedicinas se aprovechan siempre de su lenguaje, jerga y metodología para simular, distraer y fabular principios terapéuticos de productos realmente vacuos.

Si a esto le añadimos una campaña comercial apabullante en la tele de madrugada, dos famosos y una ley extremadamente laxa tenemos el nacimiento de un verdadero 'producto milagro'. La siguiente lista es un recorrido vergonzoso por una docena de ejemplos de los productos milagro que han marcado época. Nostalgia mezclada con pseudociencia.

12.- Parches de titanio

Si un príncipe se pone un parche de titanio al cuello en una regata ante decenas de fotógrafos tienes el éxito de tu 'producto milagro' asegurado. Si el titanio coge fama como material hipoalergénico, sin rechazos e ideal para prótesis en cirugía ¿por qué no inventarse que además tiene propiedades que combaten “las corrientes bioeléctricas, obstruidas y alteradas que recorren tu cuerpo”?

Aprovechar la fama inherente a un material para generar cualidades inmerecidas, otro mantra del que abusa la pseudociencia y estos productos. La principal web de venta en España ya ha desaparecido. El príncipe sigue siendo príncipe.

11.-PowerBalance

Una entrada a punto de abandonar la lista después de liderarla durante casi dos años. Un engañabobos de incautos y famosos pagados por la marca que intentó convencernos de los poderes mágicos de su espantoso holograma. En la farmacia la recomendaban a ancianos con problemas de equilibrio, a niños deportistas y hasta enfermos reumáticos.

Heredera de la cutre-pulsera rayma se hizo con el mercado con una brutal campaña comercial que engatusó a deportistas sin cabeza. Un sector con dinero muy vulnerable al fraude. El mayor tongo de marketing sanitario y pseudocientífico de la década de una empresa que, al final, 'solo' suspendió pagos.

Da igual lo que les pase, las pulseras energéticas ni se crean ni se destruyen, simplemente se transforman.

10.-Champú de caballo

'Lo que es bueno para el caballo de mi vecina tiene que serlo para la burra de mi hermana'. Este sería el resumen de la moda del champú de caballo que, como el resfriado, siempre es superlativo si es equino… Merece un puesto de privilegio en esta lista porque ¿quién no ha deseado tener las crines ásperas y abiertas de un corcel azabache?

Los productos milagro siempre buscan su ventaja competitiva en un detalle, ejemplo o sistema natural poéticamente admirable y algo enrevesado para poder entenderlo. Nadie compraría un producto contra la congestión nasal que funcionase maravillosamente en perros (los caracoles son una excepción). El champú solo lava, sea de caballo o de unicornio.

El pelo es materia orgánica muerta, un cadáver celular que no ‘come’ y que solo merece chapa y pintura. Para fortalecerlo hay que actuar sólo en los folículos pilosos debajo de la piel, donde el producto no llega ni se absorbe. De hecho, muchos de los aminoácidos (moléculas de gran tamaño) que anuncian como aditivos de cientos de champús no caben -literalmente- por los poros de la piel. Lo único eficiente para alimentar esa parte minúscula de pelo vivo es tomar las vitaminas por la boca. Así de simple.

Recordad: el Pelo Pantene es también un pelo muerto

9.-Ecobola

Una irrupción seria en el top 12. Un ejemplo de producto creado para dar de comer bien a más de uno previa invasión arrolladora en todos los servicios de teletienda del país, pero la ecobola no lavaba más allá de cerebro de sus ingenuos compradores.

Prometía dejar tus pantalones limpios sin detergente alguno y lo único que conseguía limpiar es los bolsillos. Sanidad tuvo que tomar medidas contra todos los fabricantes por publicidad engañosa. El producto limpiaba... sí, por el mismo efecto de roce que meter una bolsa llena de piedras entre tu colada… pero por 60 euros más.

8.-Agua en polvo

La entrada más fuerte de la lista. La carcajada más grande del siglo... Agua en polvo. Échele agua y tendrá agua. ¿Seguro? ¿y el polvo? —"Siempre llevo un sobre en el bolso por si acaso", —“El médico me recomendó beber mucho agua para reducir peso, gracias a ‘agua-en-polvo’ he podido llevar mi dieta sin esfuerzo”... ¿Y si no tienes agua vale con escupir?

Lo que parece una parodia de los Monty Phyton no es más que una web que fabricó una broma para llevarse una perras de publicidad con Adsense. Dio la vuelta al mundo y, lo que es peor, generó un ejército de acólitos creyentes que difundieron la farsa por foros y chats.

Digas lo que digas en internet siempre habrá alguien que lo defienda. El ejemplo perfecto para crear un poso de duda que genere el interés comercial del incauto. Mecanismo propio de la cultura pseudocientífica. Afortunadamente no pasó de ahí.

7- Ahuyentadores por ultrasonidos

Lo que no se ve, lo que no se toca y lo que no se oye sigue siendo el mejor recurso para defender lo que no sirve. Quizás porque es más fácil esconder la evidencia y porque siempre es inocuo ¿Qué es mejor, productos químicos peligrosos para exterminar plagas o un aparatito  más inocuo que la ingenuidad del que lo compra? Hasta siete análisis de método científico de laboratorio realizados entre 1977 y 2006 han demostrado que estos aparatos no sirven para ahuyentar más de lo que sirve una palmada dada a tiempo.

Que los animales e insectos tengan distinto espectro auditivo no significa que cualquier cosa les moleste o no puedan acostumbrarse. Además, la solución profesional para una plaga no es mandársela al vecino, sino exterminarla.

6.-Agua imantada

No podía faltar en el ranking. 75.000 resultados en Google. Está claro que la ignorancia sigue vendiendo. El mito del agua imantada (magnetizada) aún sobrevive.

Atención: “Mejora la digestión, reduce el exceso de acidez, normaliza el peristaltismo intestinal, elimina los deshechos tóxicos, tiene efecto sedante, ayuda a reducir el asma, la celulitis, el estrés y la migraña; evita la cal en las tuberías y hasta acelera la velocidad de crecimiento de los cultivos”. Todo haciendo circular el agua por el campo magnético de un imán. ¿Quién no tomaría algo así?

En España una sentencia de la Audiencia provincial de Cádiz de 1996 supuso un palo judicial sin precedentes a la venta de productos milagro. La primera condena por publicidad engañosa fue a una empresa que vendía productos para magnetizar agua desde tu casa, Acar-Sud, S.L.

La moda de magnetizarlo todo no escampa. Desde calzoncillos iónicos para evitar la impotencia hasta niños serbios que atraen cualquier objeto hacia su cuerpo (...y en realidad se lavan poco), pasando por el segundo nivel del agua magnetizada: el Agua Diamantina. No sólo recuerda su estado atómico sino que almacena las buenas intenciones para pasárselas a quien la bebe teniendo acceso a una inteligencia más elevada.

Si el agua se pudiera magnetizar, los procesos osmóticos celulares, imprescindibles para la vida, serían químicamente imposibles. Pero jugar con la ingenuidad de millones de enfermos desesperados sigue siendo demasiado rentable.

5.- Baba de Caracol

Un producto entrañable, que rompe con la formulación de mecanismo milagroso y agradable. Si quieres tener un cutis impecable al menos haz el esfuerzo de untarte esta asquerosidad por la cara. El orgullo de hacerlo potenciará seguro sus efectos. Como lo de mearse las manos para evitar su cuarteo ¿o había que bebérselo, Txumari?

La panacea no puede explicarse desde un mero producto cosmético. Lo que promete sólo lo hacen los medicamentos, y no todo y no siempre. La baba de caracol es un producto que funciona como hidratante ¡Qué raro! ¿alguna baba no lo es? pero de ahí a eliminar cualquier cicatrices hay un gran trecho y una irresponsabilidad muy grande.

4.-Tiras de Kinesiología

Al rey muerto rey puesto. Nos quedamos sin las bonitas Powerbalance pero estas tiras- pegatinas-tatuajes de colorines me hacen parecer supermoderno al descamisarme en la cancha de basket del barrio. Directas al top-5. Diseño, pseudociencia y marketing, mucho márketing y poco método científico sin sesgo comercial.

Algún genio descubrió que el esparadrapo no es lo suficientemente ‘chic’ para deportistas de alto nivel con publicidad hasta en la funda de sus dientes y pensó en darle más color a sus vidas. En los juegos de 2008 la empresa Kinesio Holding Corporation regaló a los deportistas con los mejores cuerpos del mundo 50.000 rollos de venda elástica de colores para que 2000 millones de personas admiraran sus culos de colores. Éxito asegurado... de otro placebo.

3.- Economizadores de combustible

¿Os imagináis un aparato que por apenas 60€ lograra un 20% de ahorro de combustible en tu coche? La revolución de la industria automovilística. La patente más lucrativa de la historia. Todas las marcas llevarían el dispositivo incorporado. Como pasa en informática. Lo que se demuestra bueno, eficaz e industrialmente rentable acaba por convertirse en un estándar que usa todo el mundo y hace ricos a unos cuantos.

Raro que los fabricantes no hayan querido hacerse multimillonarios con su invento y no pasen del mercado menor de teletienda y webs sin encanto. Pero esto podría ser sólo una evidencia de ingeniería social: el método científico exige estudios para demostrar su eficacia o inutilidad y no hay más que testimonios. Basta con preguntar a un buen científico para desmontar el mito.

Muchos hablan de un ahorro en el consumo, comentando maravillas de los imanes y sin tener en cuenta que el dispositivo abraza el canal de inyección, estrangulando su sección y limitando el consumo… también las prestaciones. Por 1€ te doy yo un consejo con las mismas consecuencias y ahorro: levanta el pie del acelerador.

2.- Kit de urgencias Homeopáticas

¿Se imaginan curar una hemorragia masiva con unas decenas de bolitas de anís? Este Kit Homeopático de Urgencia propone combatir una de las mayores carencias argumentales de la mayoría de las medicinas alternativas: los resultados a corto plazo.

Siempre digo que la mejor y más barata medicina después del placebo es el paso del tiempo. Cualquier terapia alternativa basada en la pseudociencia y charlatanería se aprovecha de los mejores mecanismos de curación natural para esconder su taumaturgia, de ahí su lucha constante por promocionar lo imposible.

Todo es una risa si hasta el propio farmacéutico te cambia un tratamiento de medicina responsable por los anisetes. Este Kit no merece más comentarios.

1.- Ahorradores de energía eléctrica

Nuestro ganador. Directamente al número 1 de este peculiar ‘HitParade’. ¿Quién se va a resistir a ahorrar un 35% en la factura de la luz que ha subido un 70% en seis años y con solo una inversión de unos pocos euros?

Se venden con el rimbombante nombre de ‘corrector de factor de potencia’ y van directos al top porque, a diferencia de otros productos milagro, los homologados sí utilizan un principio eléctrico real para producir una mejora (infinitesimal)... pero a tu compañía eléctrica.

Digamos que el pequeño condensador (si lo lleva) filtra los armónicos de tu instalación eléctrica ayudando a no propagar perturbaciones a la red de tu compañía. También logra reducir ligeramente la intensidad de corriente que fluye por los electrodomésticos de tu vivienda, pero esto no tiene ningún efecto sobre el consumo de potencia "real".

El caso es que las industrias sí que utilizan condensadores, pero gigantes, para reducir el factor de potencia porque su forma de facturación con la compañía es radicalmente distinta y les penaliza el exceso de potencia reactiva generada en grandes bobinas y motores.