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YA HA SIDO CAPAZ DE PASAR POR LABERINTOS COMPLEJOS
Los cíborgs están llegando a todos los lugares donde los ingenieros tienen inventiva. Y esto incluye animales robotizados. Insectos, perros… y ratas. Y no unas ratas cualquiera, sino unas que podemos someter a nuestra voluntad. Investigadores de la Universidad de Zhejiang, en China, han ideado una rata cíborg cuya locomoción se puede controlar mediante nuestro cerebro.
La rata funciona así: la persona tiene un pensamiento con el que quiere mover el robot. Dicho pensamiento es captado por electroencefalografía y se transmite a un ordenador.
Este, mediante señales inalámbricas, las lleva a un estimulador que lleva la rata en su parte posterior, y de aquí van a su ‘cerebro’ por medio de unos electrodos.
En el experimento que realizaron los científicos chinos, varias personas controlaron las ratas por un laberinto. Pensando en mover el brazo izquierdo, el ratón giraba a ese lado, y pensando en el brazo derecho hacia este otro.
Por último, el parpadeo significa movimiento. Los laberintos tenían varios niveles de dificultad.
De acuerdo al estudio, las órdenes funcionan casi al instante y con una buena precisión. Esto se debió a la “agilidad”, según palabras del texto, de los propios cíborgs.
Hasta el momento, los aparatos que se habían patentado en este sentido habían sido para controlar prótesis médicas o similares. Sin embargo, los autores del estudio van más allá, porque sugieren que el cíborg puede también mandar señales al cerebro.
Científicos que han visto las conclusiones a las que ha llegado el equipo chino creen que la invención podría tener aplicaciones como, por ejemplo, el control de animales en espacios angostos, pero también lo podrían usar cirujanos para controlar las manos de un compañero durante una intervención. Incluso, podría servir para la estimulación neurológica de pacientes con problemas.