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imposible de ver por el ojo humano
En su día, pequeños y mayores, imaginamos tener una capa de invisibilidad como la de Harry Potter para, cuando nos viniese en gana, pasar totalmente desapercibidos.
Ahora, parece que el sueño de muchos está más cerca de lo que podríamos imaginar. Un grupo de investigadores del Instituto Nacional de la Investigación Científica (INRS) de Montreal, con el español José Azaña a la cabeza, ha logrado diseñar el primer objeto totalmente invisible al ser iluminado con luz de espectro completo.
El problema que se habían encontrado hasta la fecha quienes se habían atrevido a diseñar un objeto así era que, si bien era invisible al ser iluminado en un rango determinado y muy concreto de frecuencias, era totalmente visible al ser iluminado con otras frecuencias de luz.
Así, al iluminarlos con luz roja pasaban totalmente desapercibidos, pero si los enfocábamos con luz verde sí que podríamos verlos. El más difícil todavía era superar la prueba al ser iluminados con luz natural, que en su rango de frecuencias contiene todos los colores. Misión imposible.
Otro de los factores que imposibilitaba lograr la invisibilidad era conseguir alterar los intervalos de tiempo en los que los distintos espectros de la frecuencia de la luz atravesaban el objeto. Al pasar cada color en distintos momentos, el objeto sería visible antes o después.
Los hallazgos de este grupo de investigadores han superado estas limitaciones. Para ello, han conseguido que las ondas, en lugar de rodear el objeto, se propaguen a través del mismo para así evitar distorsiones.
Han encontrado así la forma de desplazar las frecuencias de luz a esas regiones concretas del espectro que no se verán afectadas ni por la reflexión ni por la propagación de luz a través del objeto a ocultar.
Es decir, en caso de tratarse de un objeto de color verde, lo que hace el dispositivo que han diseñado estos investigadores es desplazar esa frecuencia del espectro a otra región azul, por ejemplo, para que al llegar al objeto que queremos hacer invisible no lo ilumine la luz verde.
De esta forma, al esquivar el objeto, el dispositivo de invisibilidad invierte el desplazamiento de la frecuencia y reconstruye el estado inicial de la onda.
Sin embargo, el dispositivo de camuflaje de los investigadores del INRS solo funciona si el espectador mira desde la trayectoria de la luz, mirando el objeto a través del primer filtro. No obstante, José Azaña insiste en que el método que ha descubierto su equipo podría logra que el objeto sea invisible desde cualquier perspectiva.
Por ahora, y aunque muchos ya podrían estar pensando en hacerse con una capa de invisibilidad, lo cierto es que el principal uso que tendría este dispositivo sería proteger las telecomunicaciones, que usan ondas de banda ancha para transportar los datos.
Con este método, las compañías de telecomunicaciones podrían hacer que ciertas frecuencias de sus redes sean invisibles impidiendo que otros agentes usen la luz de banda ancha para saber qué se envía.