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PROBLEMAS CON TU CUERPO
Las manías y temores son de lo más variado, cada día aparecen nuevos miedos y se les pone nombre. Uno de los últimos sorprende a cualquiera, y es que algunas personas no pueden soportar el paso del tiempo y el cambio físico que experimentamos con él. ¿Solución? Te lo contamos.
Desde siempre han existido las fobias, ese intenso temor que se siente hacia algo en concreto con motivo o sin él. Uno de los últimos está relacionado con el deterioro de la piel, las arrugas. En eso consiste la famosa ritifobia, en tener pánico a estos pliegues. Lo curioso es que este miedo no solo aparece en las personas mayores, sino que los más jóvenes también pueden padecer esta aversión.
Vivimos en una sociedad consumista en la que la imagen es la mejor carta de presentación y las redes sociales así lo prueban. La psicóloga Verónica Fuchslocher asegura que: “El prototipo de mujer que se impone en la sociedad del siglo XXI es delgada, con aspecto jovial, cuestión que representa una inversión costosa en cremas, mascarillas (…)”.
Es más común en las mujeres que en los hombres ya que son ellas las que están más pendientes de mantener una imagen fresca y renovada. No es una cuestión de edad, sino de la personalidad que tenga cada uno y la seguridad en nosotros mismos. Estas personas sienten que la aparición de estas estrías va a poner en peligro tanto su vida personal como profesional.
Según un estudio realizado por la Universidad Northwestern las mujeres que no superan los 30 años están mucho más preocupadas por no tener arrugas que por padecer enfermedades como el cáncer de piel. Esto sería una prueba más de los valores superficiales que anidan en la sociedad.
Sin embargo, hay solución en los casos en que la fobia no se ha desarrollado demasiado. Lo primero es pensar en positivo y trabajar la espiritualidad, con ellos intentaremos valorarnos más y mejor a nosotros mismos en vez de estar cuestionando nuestro aspecto físico todo el día. Después, si quieres mantener tu piel cuidada hay muchas formas de lograrlo: dormir las horas necesarias, aplicar protección solar, exfoliantes…