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¿Conservas los resultados de aquel test de inteligencia que te hicieron cuando ibas al colegio? Pues es hora de desempolvar los papeles. Según un reciente estudio científico, que tengas un cociente intelectual u otro no sólo indica cómo de bien se les dan las matemáticas, la buena memoria que tienes o lo bien que te expresas: también predice cuántos años vas a vivir.
Investigadores de la Universidad de Edimburgo han demostrado que cuanto mayor es tu cociente intelectual a los 11 años de edad, más papeletas tienes de gozar de una larga vida.
Han llegado a esa conclusión tras analizar los datos de más de 65.000 escoceses y escocesas, de forma que comprobaron que cumplir 79 es mucho más probable cuando tu nivel de inteligencia es alto. Concretamente, una puntuación elevada en este tipo de pruebas reduce en un 28% la muerte por enfermedades respiratorias, un 25% el riesgo de problemas coronarios mortales y un 24% el fallecimiento por infarto.
Por si fuera poco, también disminuyen los cánceres relacionados con el tabaco, sobre todo de plumón y estómago. Y eso sin contar con que los niños inteligentes crecen sufriendo menos lesiones, enfermedades digestivas y casos de demencia.
A la vista de las conclusiones no parece que fuera casual que Isaac Newton, el padre de la ley de la gravedad, tuviera un CI de 190 y falleciera a los 85 años. O que Galileo Galilei, con un CI de 185, viviera 78 años en una época en que la esperanza media de vida era bastante baja y apenas había septuagenarios.
Entre otras razones, los resultados se deben a que las personas inteligentes 'se cuidan más', entre otras cosas porque suelen evitar el tabaco, así como los trabajos que implican un riesgo físico. Lo que aún no está tan claro o si existen también factores genéticos que vinculan ser un lumbreras con una mayor esperanza de vida.
Usar los test de inteligencia como una bola de cristal para predecir el futuro puede funcionar también en otros asuntos. Por ejemplo, se ha demostrado que un bajo CI suele estar ligado con un elevado riesgo de abusar del alcohol, a lo que se añade que de que existen evidencias de que las personas con una alta inteligencia tienden a ser más perezosas e incluso a llevar un estilo de vida más sedentario.
De acuerdo con los científicos, eso se debe en esencia a que no se aburren "y no necesitan ocupar todo su tiempo con actividades".