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Un reciente estudio concluyó que hay una afición más completa desde el punto de vista del bienestar emocional y el relax.
Siempre se ha dicho que para cuidar nuestra salud mentalpractiquemos actividades físicas como ir al gimnasio, salir a caminar, o meditar, entre otras. Sin embargo, un reciente estudio acaba de revelar que hay una afición más completa desde el punto de vista del bienestar emocional y el relax. Te contamos los detalles.
Se trata de coser. Y es que contrario a la creencia popular de que coser es una actividad sedentaria y anticuada, la investigación, llevada a cabo por la Universidad de Cardiff, resalta que esta práctica tiene un profundo impacto positivo en el bienestar mental.
Coser y tejer no son simplemente actividades mecánicas; requieren concentración, creatividad y un nivel de implicación que activa diversas áreas del cerebro. Los expertos en neurociencia señalan que los movimientos repetitivos y rítmicos que se realizan al coser estimulan la producción de neurotransmisores como la serotonina y la dopamina, los cuales están asociados con la sensación de felicidad y bienestar.
Uno de los aspectos más destacados de esta actividad es la satisfacción personal que proporciona el concluir un proyecto de costura. Completar una pieza hecha a mano da un sentimiento de logro que activa la liberación de oxitocina, conocida como la hormona del bienestar. Esta sustancia química natural no solo contribuye a la sensación de felicidad y calma, sino que también refuerza el deseo de continuar con la actividad.
Los expertos en neurocienciología han comprobado que los beneficios que aporta el coser o tejer van más allá de los psicológicos:
Por último, otra de las grandes ventajas de esta afición que ya practican muchas personas en España, bien tejiendo con ganchillo o agujas de punto, o bordando, es que nos invita a socializar, a hacer comunidad, y eso tiene mucho que ver también con la salud mental.