LO DIJO ARISTÓTELES

Estos son los tres tipos de amigos que hay que tener en la vida para ser feliz, según un experto de Harvard

Dos tipos de amistades ayudan a avanzar en la vida y el otro es importante ser feliz.

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A los seres humanos además de que nos gusta hacer cosas solos, disfrutamos un montón de nuestras amistades y de rodearnos de buena compañía. Todo ello juega un papel muy importante a la hora de ser felices. Lo dice incluso Harvard, que afirmó en su The Study of Adult Development que las relaciones positivas es lo que hace felices a las personas.

Según este estudio, "todos nosotros estamos conectados a todo el mundo y necesitamos de los otros (...) Cuando me puedo quejar con otra persona puedo sentir que el cuerpo recupera su equilibrio; la persona sola no puede calmarlo, mientras que la que tiene relaciones sí", explican.

Mantener unas amistades fuertes y estables a largo plazo es, por tanto, la clave de la felicidad según este estudio de Harvard. ¿Y las amistades, pueden ser de distinto tipo? ¿Son más válidas unas que otras? Te contamos los detalles.

Ya antiguamente, el filósofo Aristóteles habló sobre tres tipos de amistades que todos tenemos y deberíamos tener. Ahora, Arthur Brooks, profesor de Harvard, ha vuelto a destacar esta idea.

Amistades de utilidad

Este tipo de amistades son las relaciones en las que das algo y recibes algo a cambio, también se puede denominar relaciones de tipo transaccional. Un ejemplo que utiliza Brooks para explicar esta teoría son las relaciones laborales o de negocios, en las que realizan intercambios frecuentemente.

Amistades basadas en el placer

Se trata de un tipo de relación en la que ambas personas tienen una admiración mutua entre ambos. Un ejemplo de relación basada en el placer puede ser cuando tienes un amigo inteligente, y este amigo, a modo de fuente de información, te proporciona datos o cosas que no sabías.

Amistades perfectas

Según explicó el propio Aristóteles, este tipo de amistades son las que no solamente se basan en la utilidad o el placer, sino que se centran en mejorar la vida del otro. Son aquellas que elevan el comportamiento de una persona a la virtud.