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OBESIDAD Y SOBREPRESO
La reubicación de los productos se mantuvo durante 6 meses en 3 supermercados de Inglaterra
Los supermercados son la principal fuente de acceso directo a la comida que tiene la población mundial, sobre todo en las naciones más industrializadas. Es el lugar donde planificamos y gestionamos nuestra alimentación y al que acudimos con frecuencia. Sin embargo, según un nuevo estudio, nuestras decisiones de compra no solo vienen determinadas por los productos que se han agotado en casa apuntados en la lista, sino también están muy mediadas por el diseño del supermercado.
La investigación, publicada en la revista científica PLOS Medicine, ha sido realizada por la Universidad de Southampton (Reino Unido) para conocer si la mejor ubicación de frutas y verduras en detrimento de confitería y productos no saludables tendría una repercusión directa en los hábitos de compra de los consumidores.
Un estudio piloto
Para la obtención de los datos, los investigadores escogieron seis tiendas de una cadena de supermercados de descuentos en una zona desfavorecida de Inglaterra. Además, se establecieron dos componentes de intervención: a) la colocación de nuevos stands de frutas y verduras justo en la entrada de la tienda y b) la eliminaciónde los puestos de confitería de las cajas y de los pasillos más cerca de ellas.
La efectividad de la medida se valoró usando la técnica de control. A tres supermercados se les aplicó la intervención y otros tres quedaron como grupo de control, es decir, se mantuvieron igual que siempre. La muestra elegida fueron 150 mujeres de entre 18 y 45 años que contaban con una tarjeta de fidelidad a la cadena de alimentación.
Beneficio para la salud
El análisis de los datos ha mostrado que el aumento de las ventas de frutas y verduras fue mayor de lo previsto. A los tres meses de la intervención, la venta de frutas y verduras se incrementó en 6.170 porciones adicionales por semana en cada tienda. A los seis meses, las porciones adicionales de frutas y verduras vendidas fueron 9.820 por semana en cada tienda.
No obstante, el consumo de productos de confitería y alimentos poco saludables se redujo. En concreto, las ventas de artículos de confitería en las tiendas de la intervención fueron de 1.359 y 1.575 artículos menos a la semana por tienda, a los tres meses y a los seis meses de la nueva reubicación, respectivamente.
Sobrepeso, obesidad y posibles medidas
Este resultado es sumamente importante ya que, según datos del Ministerio de Sanidad obtenidos en la Encuesta Europea de Salud en España en 2020, el 61,4% de hombres y el 46,1% de mujeres – de más de 18 años – padecen sobrepeso u obesidad.
De esta manera, la investigación ha establecido una relación directa entre la capacidad de influencia que tiene la ubicación de los productos de alimentación a la hora de decidir qué comprar en el supermercado.
En definitiva, una distribución más saludable de los artículos en los supermercados podría mejorar el perfil nutricional de las ventas en las tiendas, y probablemente, mejore la calidad de la compra y la dieta de los hogares. La colocación de frutas y verduras cerca de las entradas de las tiendas debería considerarse junto con políticas que limiten la colocación prominente de alimentos poco saludables.
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