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24 MESES
Al parecer, los pacientes con COVID persistente podrían empezar a notar una mejoría a los dos años, según un estudio.
Los síntomas de la COVID a menudo no terminan cuando las personas dan negativo, lo que suele ocurrir al cabo de unos 10 días. De hecho, hay casos en los que los síntomas han llegado a durar meses y meses. Es lo que se conoce como COVID larga, es decir, cuando después de sufrir esta afección, los síntomas siguen estando durante mucho tiempo. Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de Estados Unidos consideran que cuatro semanas son suficientes para sospechar de COVID larga.
Y esto, ¿dura siempre? Lo cierto es que hasta ahora no se tenía mucha información acerca de esto, pero un reciente estudio publicado en Nature Communications asegura que las personas con síntomas pueden notar una mejoría al cabo de dos años. Aunque no todas. Te lo contamos.
Gail Matthews, médico especialista en enfermedades infecciosas y autor del estudio afirmó que "al parecer el sistema inmunitario de esas personas ha vuelto en gran medida a lo que cabría esperar, y eso es muy bueno".
Sin embargo, como mencionábamos, no todas las personas van a mejorar pasados 24 meses. Esto es algo que no se explica en el estudio, pero podría deberse a otras condiciones de salud subyacentes, dice Matthews. Sin embargo, hay pruebas de mejoras significativas tanto en las alteraciones inmunológicas como en la salud autodeclarada de muchos pacientes dos años después de COVID.
"Es una buena noticia para los pacientes con COVID larga que, con el tiempo, no sólo se resuelvan las alteraciones inmunitarias, sino también los síntomas", afirma Nadia Roan, inmunóloga de los Institutos J. David Gladstone de la Universidad de California en Estados Unidos.
Un grupo de investigadores de Sidney comenzaron a recoger muestras de sangre de algunos pacientes de COVID-19 en abril de 2020 y estos informaban periódicamente sobre su estado de salud.
En 2022, los científicos descubrieron que las moléculas del sistema inmunitario relacionadas con la inflamación seguían siendo anormalmente altas en la sangre de los pacientes que sentían fatiga, dificultad para respirar o dolor torácico, ocho meses después de la infección. Es decir, padecían COVID larga.
Para llevar a cabo esta investigación, los expertos realizaron un seguimiento de 62 de los pacientes con COVID larga durante un año y medio más y descubrieron que los biomarcadores que antes indicaban una función inmunitaria anormal en sus muestras de sangre habían descendido en gran medida a niveles normales.
"Se trata de un estudio bien realizado que demuestra que algunas personas pueden mejorar su función inmunitaria con el tiempo", afirma Timothy Henrich, profesor de medicina de la Universidad de California en San Francisco (Estados Unidos).
Sin embargo, se trata de un estudio en el que no se han tenido en cuenta otros factores que también causan la COVID larga, como la sobreactivación de la parte del sistema inmunitario denominada "complemento", que protege al organismo de las infecciones y la inflamación, y la anormal coagulación de la sangre o sistema de coagulación, que también se ha demostrado que causa algunos síntomas COVID larga.
Por ello, a pesar de este gran avance, todavía se necesita más investigación.