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APRUEBAN SU USO POR PRIMERA VEZ EN EE UU
La Administración de Alimentos y Fármacos de Estados Unidos aprobó el primer implante para el tratamiento contra la dependencia de opiáceos, como la heroína.
El fármaco Probuphine está diseñado para suministrar una dosis constante de buprenorfina a los pacientes en tratamiento.
Así, los drogodependientes regulan el síndrome de abstinencia durante el tratamiento de desintoxicación o en fases de recaídas.
Según la administración estadounidense, este tipo de control sobre la dosis hace que el riesgo de muerte entre estos pacientes se reduzca a la mitad.
El implante de buprenorfina suple así a los tratamientos tradicionales –píldoras bajo la lengua, por ejemplo-, cuyas dosis diarias o periódicas pueden verse alteradas por olvidos del paciente, robos o ausencias a los centros de salud.