Las jirafas duermen de pie y los vencejos mientras vuelan: los animales con las formas más raras de descansar

La forma más común para dormir es en posición horizontal, como lo hacemos los humanos , y con todo el cuerpo relajado. Pero no todos los animales duermen así, te contamos las formas y posturas más extrañas en las que duermen algunos animales.

Las jirafas duermen de pie, no tumbadas. Esto se debe a que en esta posición son capaces de reaccionar de forma rápida en caso de peligro. Sus patas miden entre metro y metro y medio cada una, lo cual también es un factor que les hace más difícil doblarlas para descansar. Duermen un máximo de dos horas al día, dividido en periodos de 10 minutos cada uno. En casos excepcionales, cuando se sienten muy seguras, pueden llegar a dormir un máximo de 20 minutos y reposan su cabeza doblando el cuello sobre los cuartos traseros.

Otra forma de dormir curiosa es la de los vencejos. Este tipo de ave ha adaptado su forma de vivir al aire y no para su vuelo para dormir ni comer. Se alimentan a base de insectos que ingieren mientras vuelan. Su forma de descansar también tiene lugar mientras están en el aire. Alcanzan una gran altitud y comienzan a planear, por ello sólo duermen en periodos de tiempo muy cortos. El único momento en el que detienen su vuelo es durante la época de reproducción.

Las nutrias de mar, que pertenecen a la misma balsa, suelen dormir cogidas de la mano entre ellas. Esto lo hacen para no separarse del grupo ya que duermen flotando sobre el agua y las corrientes marinas pueden moverlas en distintas direcciones. Además de esta forma curiosa de dormir, sólo cierran un ojo mientras descansan para estar alerta ante algún posible peligro.

Algunos reptiles, como las serpientes, duermen con los ojos abiertos. En esta ocasión no lo hacen para estar alerta como en los casos anteriores, duermen de esta manera ya que no tienen párpados. La forma de saber que están descansando es ver si están enrolladas. Esta es la posición que adoptan cuando descansan.

Para mamíferos como los delfines, dormir no implica la desactivación total de todos los músculos voluntarios. Su manera de dormir recibe el nombre de “Sueño de ondas lentas unihemisférico”. Solo un hemisferio de su cerebro pierde conciencia, por lo tanto, duermen con un ojo abierto. Cuando duerme el hemisferio derecho, el ojo izquierdo es el que se queda abierto y viceversa. La parte del cerebro que queda activa, es la que se encarga de controlar la respiración. Esto se debe a que al ser mamíferos que viven bajo el agua no cuentan con branquias, por lo que deben salir a respirar cada media hora máximo. Por ello, es muy importante que al dormir una parte de su cerebro quede pendiente a la respiración para que puedan subir a la superficie a por oxígeno cuando les sea necesario.

SEGURO QUE TE INTERESA:

Ortosomnia: la obsesión por dormir bien que puede perjudicar tu sueño