GRIPE INTESTINAL

El norovirus se expande por España: qué es, síntomas a tener en cuenta y cómo prevenir el contagio

Este virus se suma a los casos de gripe y resfriado que han dejado las fiestas navideñas.

Tras las fiestas navideñas, a la gripe y los resfriados se ha unido un nuevo virus: el norovirus. Este está afectando a muchos españoles por su alta capacidad de contagio. Te contamos qué es, cuáles son sus síntomas y cómo prevenir el contagio.

Qué es el norovirus

El norovirus es la principal causa de gastroenteritis aguda, una inflamación del estómago o de los intestinos. Esta infección puede causar vómitos y diarrea graves, y es altamente contagiosa. Su método de propagación es a través de alimentos o agua que se contaminan durante la preparación o superficies que han sido contaminadas. El motivo de contagio más común es el contacto cercano con personas infectadas.

Una mujer con dolor de estómago | iStock

Síntomas

Una vez contagiado, los síntomas suelen comenzar entre 12 y 48 horas después. Estos duran de 1 a 3 días y en el caso de niños y personas mayores pueden provocar deshidratación grave. Entre los más frecuentes se encuentran:

  • Náuseas
  • Vómitos
  • Dolor o calambres estomacales
  • Diarrea líquida o blanda
  • Sensación de malestar general
  • Febrícula
  • Dolor muscular

Entre todos ellos, los médicos están advirtiendo los dos signos principales a los que prestar atención, ya que aparecen sin previo aviso. Estos síntomas son la diarrea y los vómitos.

Tratamiento y cómo prevenir el contagio

No existe un tratamiento específico para el norovirus, puesto que los antibióticos no sirven para tratar afecciones de este tipo.

En caso de contagiarse, los médicos recomiendan tratar de mantenerse hidratado. Además, también es aconsejable beber abundante agua, suero, caldos o cualquier tipo de solución de rehidratación oral.

Por último, evitar la ingesta de alimentos grasos y descansar también es clave. Es por eso que es recomendable mantener una dieta blanda y basada especialmente en la hidratación.

Para evitar el contagio y la propagación del norovirus, debemos lavarnos las manos con agua y jabón con frecuencia, especialmente después de usar el baño o de manipular alimentos, así como limpiar y desinfectar las superficies contaminadas.