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¿LO SABÍAS?
Nuestro cerebro recibe infinidad de estímulos diarios. Te contamos por qué a veces es importante parar y llegar a aburrirse.
A lo largo del día, con todas las tareas, trabajos y estudios que llegamos a realizar y las distintas actividades que vayan surgiendo, o simplemente mirar nuestras redes sociales, no tenemos tiempo para aburrirnos.
Nuestro cerebro está siempre recibiendo un gran número constante de estímulos que le permiten alimentarse, pero este hábito puede ser perjudicial en algunas ocasiones, sobre todopara la atención en determinados momentos.
Estar aburrido no siempre es malo
Todos pensamos que el aburrimientoes algo malo. Sin embargo, puede ayudarnos a ser mucho más productivos, resolutivos y creativos. El cerebro también necesita su descanso y no sólo el derivado por dormir. Parece sorprendente, pero para nuestro cerebro es bueno de vez en cuando no hacer nada y aislarnos en nuestros pensamientos.
Al no recibir estímulos exteriores, nuestros cerebros deben generar una serie de recursos propios, buscando cierta interacción e información del exterior. Esa circunstancia también puede pasar en trabajos muy mecánicos.
Puede decirse que, gracias a esos momentos de aburrimiento, el cerebro se relaja, ya que al recibir infinidad de estímulos puede perder gran capacidad de atención y derivar en una sobresaturación de nuestra mente y memoria. Por eso realizar esta pausa que para nosotros no es relevante, puede ser de vital importancia en ciertos momentos.
Por eso es importante, y por mucho que nos cueste, debemos de parar, pensar y reflexionar sobre nosotros mismos. Deja que tu cuerpo se aburra y te darás cuenta de esa necesidad de nuestro cerebro en la búsqueda de estímulos que lo alimentan.