LO CONTRARIO A LA NIÑA

Qué es el fenómeno meteorológico El Niño

Estos fenómenos meteorológicos afectan al océano Pacífico y a las costas de América del Sur y Central. Sin embargo, puede que El Niño también deje huella en España.

Fenómeno meteorológico El NiñoNASA/JPL-Caltech

Existen muchos fenómenos meteorológicos: lluvias, olas de calor, sequías... Pero quizás hay otros que, debido a la zona geográfica en la que se encuentra España, no se suelan escuchar demasiado: El Niño y La Niña. Qué es El Niño que viene y por qué debe importar tanto este año.

El Niño es un patrón climático que se intercala con La Niña. Cuando sucede El Niño, el océano Pacífico tropical se calienta más de lo habitual. Esto ocurre, especialmente, cerca del ecuador y en las costas de América del Sur y Central, como explica la NASA.

Por tanto, cuando es época El Niño las aguas del océano están más calientes de lo normal, lo que propicia que se formen muchas nubes de lluvia sobre el océano que después se mueven al interior. Estas producen más lluvia de lo habitual en América del Sur y Central, aunque sus consecuencias pueden llegar también a otras partes del mundo.

En qué se diferencia El Niño de La Niña

De forma simple: El Niño es lo contrario a La Niña. Explicado de una forma más elaborada, El Niño es la fase de calentamiento del océano Pacífico, que trae consigo la creación de nubes y tormentas sobre esa zona y otras del planeta.

Por otro lado, durante La Niña la masa de agua del océano Pacífico cercana al ecuador se enfría y se seca. Así que otras zonas del planeta, como Australia, Indonesia y el sureste asiático, serán más húmedos y cálidos de lo normal mientras este fenómeno dure.

Para verano de 2023: ¿El Niño o La Niña?

En primavera de 2023 se terminó un periodo de La Niña. Después de ello, la Organización Meteorológica Mundial (WMO), señala que, en los próximos meses, es "nula" la posibilidad de que este fenómeno continúe.

En cambio, existe un 60 % de posibilidad de que desde mayo a julio de este año se desarrolle El Niño. Las probabilidades irán aumentando conforme pasa el verano y, ya en otoño será "muy probable" que el clima entre en esta fase. Así está evolucionando:

Además, los datos también apoyan esta versión, ya que los más recientes obtenidos por el satélite estadounidense-europeo Sentinel-6 Michael Freilich indican signos tempranos de un desarrollo de El Niño en el Océano Pacífico ecuatorial.