CURIOSO

¿Por qué el hielo flota?

La ciencia aclara las dudas de por qué el hielo suele flotar en superficies líquidas a pesar de su estado sólido.

El hielo es un componente material indispensable en la mayoría de las bebidas, sobre todo cuando hace calor y tenemos una mayor necesidad de refrescarnos. Se trata de agua en estado sólido, sin embargo, puede generar curiosidad a la hora de saber por qué este flota cuando entra en contacto con un líquido y, por el contrario, no se hunde como la mayoría de los sólidos.

En ese sentido, la ciencia aclara que una sustancia flota si posee una menor masa por unidad de volumen que otros componentes de una mezcla. Por ejemplo, si se arroja un puñado de rocas sobre un balde de agua, estas, al resultar más densas o lo que es lo mismo, con mayor masa, en comparación con el agua, las rocas van a tender a hundirse. Por lo tanto, para que un objeto pueda flotar, tiene que desplazar un peso fluido igual a su propio peso.

Vaso de agua con hielo | iStock

Es lo que ocurre con el agua. A pesar de su solidificación, el agua alcanza su densidad máxima a 4 ° centígrados. Sin embargo, a medida que se enfría más y se congela formándose lo que conocemos como hielo, la realidad es que esta se vuelve menos densa, concretamente un 9% menos densa que el agua líquida. De ahí que flote. Todo ello, se debe a sus enlaces de hidrógeno.

En ese contexto, una molécula de agua está formada por un átomo de oxígeno y dos átomos de hidrógeno fuertemente unidos entre sí mediante enlaces covalentes. Por lo que, a medida que el agua se va enfriando por debajo de los 4 grados centígrados, los enlaces de hidrógeno se ajustan de manera que mantienen separados los átomos de oxígeno. Esto es lo que produce una red cristalina, comúnmente conocida como hielo.

Se trata de toda una curiosidad, que a partir de ahora no podremos evitar pensar a la hora de tomar una bebida con hielo